A pesar de que ya sólo quedan cenizas en relación al 'incendio' que ha levantado Ousmane Dembélé en las últimas semanas con sus retrasos en los entrenamientos, la realidad es que desde algunos sectores de la prensa española siguen intentando avivar el fuego, al asegurar ahora que el joven futbolista estaría molesto con cómo está gestionando el FC Barcelona la situación.

Desde 'El Chiringuito', se ha asegurado en las últimas horas que a Dembélé no le habría sentado bien que se filtren a la prensa tan rápido sus retrasos en los entrenamientos, al considerar que de esta forma lo que se hace es 'matarle' de cara al imaginario colectivo de la afición culé.

En algunos sectores de la prensa se sospecha que sería el propio Barça el que filtraría la información sobre los retrasos de Dembélé a la prensa, y el jugador no estaría nada contento con ello, siempre según el medio anteriormente citado. Jordi Alba y otros miembros del vestuario azulgrana, sin embargo, ya dejaron claro en los últimos días que no hay ningún problema en el club con Dembélé.

Aunque el futbolista sabe que tiene cosas que mejorar en lo que respecta a la actitud y la puntualidad, desde el punto de vista de rendimiento, tanto él como el cuerpo técnico están contentos. En las últimas semanas está sacando a relucir su mayor nivel competitivo, hasta el punto de haber marcado cinco goles y repartido cuatro asistencias en los últimos nueve partidos.

Dembélé está 'on fire' en el plano deportivo, y al final eso es lo que cuenta. Quizá lo que ocurra es que, como está naciendo un nuevo 'crack' mundial, desde los sectores de la prensa más afines al madridismo se esté buscando desestabilizar todavía más la situación, echando más leña al fuego para así intentar frenar la imparable eclosión de Ousmane Dembélé.

Dembélé, centrado en triunfar en el Barça

Tanto el jugador como el club están tranquilos, de todas formas, y esta semana Ousmane Dembélé ha llegado puntual a todos los entrenamientos. Más allá de la información transmitida por 'El Chiringuito', a día de hoy no se conocen noticias contrastadas de que Dembélé esté molesto con el club, ni mucho menos. Lo que tiene claro es que, a partir de ahora, se dejará la piel por intentar seguir creciendo en el club de sus sueños. Y, por supuesto, por intentar mejorar en lo que ha fallado últimamente: la puntualidad.