El FC Barcelona inició el partido contra el Manchester City en el Etihad Stadium, posiblemente el más trascendente de la fase de grupos de la UEFA Champions League 2016-17, de nuevo con un once más "internacional" que de costumbre en el estadio inglés, a causa principalmente de la gran cantidad de lesiones que asolan a la plantilla azulgrana.

Luis Enrique tuvo que lidiar con las bajas de los españoles Andrés Iniesta, Jordi Alba y Gerard Piqué, tres jugadores que son titulares siempre en los encuentros importantes, pero que no pudieron estar presentes por diversos problemas físicos y, por tanto, dejaron al once azulgrana con tan sólo dos futbolistas nacionales, Sergio Busquets y Sergi Roberto.

En cuanto al resto del once, sorprendió que finalmente fuera André Gomes el escogido por Luis Enrique para ser el interior izquierdo del FC Barcelona en relevo de Iniesta, teniendo en cuenta que todas las quinielas apostaban por Arda Turan o Rafinha Alcántara.

El centrocampista turco ya estaba recuperado de sus molestias, mientras que Rafinha venía después de haberse convertido en el "salvador" del Barça en el partido contra el Granada. En todo caso, "Lucho" apostó por el equilibrio entre defensa y ataque y eligió a André Gomes, un jugador explosivo pero con facultades parecidas a las de Ivan Rakitic.