Para quienes hayan visto el FC Barcelona-Athletic de este sábado, no será ningún secreto que les digamos que a Arturo Vidal no le sentó nada bien el cambio en la segunda mitad, al creer que merecía jugar los noventa minutos para intentar la remontada contra un Athletic de Bilbao que en esos momentos tenía contra las cuerdas al conjunto azulgrana en el Camp Nou.

El centrocampista chileno siempre quiere jugar la máxima cantidad posible de minutos en el FC Barcelona, algo que es completamente entendible y muy positivo, pues rebela una actitud ilusionada con lo que tiene por delante el Barça esta temporada 2018-19, y también la voluntad de participar directamente en los éxitos del equipo.

Es por ello que las cámaras captaron cómo Arturo Vidal se tomaba con algo de resignación el cambio que preparó Valverde en la segunda mitad y a continuación, con una media sonrisa irónica, se marchaba rumbo al banquillo azulgrana después de chocar las manos con Leo Messi, quien ingresó sobre el césped para dinamizar el juego ofensivo del FC Barcelona.

Arturo Vidal cerró los ojos, echó la cabeza hacia atrás y se mostró algo decepcionado por el hecho de tener que abandonar el terreno de juego, aunque internamente lo entendió, al ser consciente de que dejaba su puesto para que entrara el mejor jugador del mundo.

Arturo Vidal entiende su rol en el FC Barcelona

Arturo Vidal, además, está disfrutando de minutos y de participación en casi todos los partidos del FC Barcelona, y se prevé que también el próximo miércoles contra el Tottenham en Champions League. Contrariamente a lo que algunos medios de comunicación publican, no existe ningún tipo de problema entre él y Ernesto Valverde.

El centrocampista chileno respeta las decisiones del 'Txingurri', como es natural en todo jugador de equipo, y piensa más en el colectivo que en el plano individual. No hay polémica de ningún tipo en este aspecto, aunque algunos se empeñen en buscarla.