Algunas semanas después de hacer los deberes en Stamford Bridge, la alineación del FC Barcelona volvía a estar a debate en el Camp Nou. El visitante, un Chelsea más que peligroso, y el objetivo, plantarse en cuartos de final de la Champions. Esta era una de las grandes noches que deciden los títulos, y acertar de inicio podía ser definitivo.

Había muchos candidatos a estar en el once, y las mayores incógnitas estaban en el centro del campo. Más allá de la presencia de Andrés Iniesta, duda hasta el último momento, había varios aspirantes entre los que elegir, con André Gomes, Paulinho y Ousmane Dembélé como grandes favoritos. El cásting acabó acertando.

Dembélé responde a la confianza de Valverde

Ernesto Valverde se decantó por su opción más ofensiva, aunque con ciertos matices que al final acabaron marcando la diferencia. Ousmane Dembélé salió de inicio escorado a la banda derecha, ocupando espacios en ataque -tanto por dentro como por fuera- y siendo generoso en el esfuerzo defensivo. Esa era su consigna.

Continuando con las buenas sensaciones de sus últimas apariciones, el francés volvió a dejar buenos síntomas sobre el verde, con más participación y un carácter más incisivo que de costumbre, pero a la vez corriendo para presionar e incluso robando balones muy cerca de su propia área. Empieza a tener la conffianza que echó de menos en sus primeros día, y el Txingurri es el primer beneficiado de tener una alternativa más para sus planes. 

Leo Messi 'regala' un gol a Ousmane Dembélé

Para acabar de confirmar que la apuesta era ganadora apareció Leo Messi, dominador absoluto del primer tiempo del partido. El argentino mantuvo al galo activo buscándole y pidiéndole ritmo, intercambiando posiciones y causando estragos en el carril derecho, por donde llegó el primer tanto del Barça.

El segundo fue por obra, gracia e insistencia del de Rosario, que robó un balón en el centro del campo y montó una contra que fue letal. Tras superar a varios defensas acercándose a la izquierda, el '10' vio solo a Dembélé en el otro lado, y le puso un balón que con un potente disparo, el de Vernon convirtió en el segundo. Otro paso adelante.