Después de acabar la temporada pasada con apenas un título y muchas dudas, el FC Barcelona decidió dar un impulso al equipo con la llegada de Ernesto Valverde, y su aterrizaje, aunque con algunos baches, está resultando muy prometedor. Unos meses han bastado para que el extremeño convenza de porqué fue el elegido en el Camp Nou.

Sus intenciones las puso sobre la mesa muy pronto, "no tocar lo que ya se hace bien e intentar mejorar el resto", y lo ha hecho con un atrevimiento que ha resultado clave. El 4-3-3 clásico de los catalanes se ha transformado en un 4-4-2 variable, con menos espacios en defensa y una fortaleza que se ha mostrado como decisiva.

El estilo, eso sí, es innegociable. Quizá este equipo se ha dejado dominar para aprender a defender, pero siempre intenta ser protagonista a base de tocar y tocar, algo que le ha valido para partidos 'pequeños' pero también en plazas decisivas. Con futbolistas de perfiles muy distintos, la idea de juego sigue clara.

Toques, pases y goles en los entrenamientos

Con los cambios que se han producido en el vestuario en los últimos meses, los entrenamientos han cobrado más importancia que nunca: En el estilo Barça se nace, pero también se hace. Los jugadores recién llegados han explicado, como antes lo hicieron otros muchos, que en las sesiones del conjunto azulgrana hay un nivel extraordinario.

Y es que sólo hay que fijarse en una sesión para ver que lo que ocurre en la Ciudad Deportiva después se traslada al terreno de juego. Ejercicios, rondos, partidillos... Todo es un pequeño ensayo, algo que hace cierto aquello de que se entrena como se juega. Y con estrellas como Leo Messi enfrente, más vale tomárselo en serio.

Lo que tampoco ha faltado en este curso es una dedicación superior a los entrenamientos personalizados. La preparación individual está resultando muy importante para superar lesiones, algo más típico, pero también para adaptar a los fichajes, algo que en algunos casos ha habido que hacer a toda mecha. Y también está funcionando.

El Barça debe rematar la temporada con títulos

Como todo en el fútbol al final la medida la pondrán los títulos. De momento la campaña se puede considerar satisfactoria, pero será más grande si se confirman todos los que están al alcance. LaLiga se ha trabajado mucho, la Copa está a un partido y para la Champions quedan cinco. Hay muchas ganas de volver a dar el golpe, y el triplete sería la mejor noticia, la confirmación de que todo va sobre ruedas.