No hay vuelta de hoja, o se gana en el Vicente Calderón o se comienza a decir adiós al título de LaLiga 2016-2017. Con una victoria frente a uno de los equipos más potentes de la competición se daría un golpe de moral y volvería un ambiente positivo al equipo. Todo lo que no sea sumar los tres puntos en el estadio rojiblanco hará obligatoriamente a los culés depender del Real Madrid.

Pero esto no es algo que se contemple desde el vestuario, pues allí lo tienen muy claro. "No podemos fallar", "nos va la Liga en ello" o "tenemos que volver a ser nosotros y mandar en el juego" son algunas de las reflexiones que han ido saliendo de la boca de los futbolistas azulgranas en los últimos días al respecto del próximo duelo.

La concentración será máxima y el partido se planteará como una mismísima final de Champions League. A partir de las 16.15 horas en el Calderón, Atlético de Madrid y FC Barcelona se jugarán el cobre por las opciones que uno y otro tienen todavía de levantar el título de campeón de la competición.

El "pinchazo" del Madrid, la motivación

Saben que el reto es difícil y mayúsculo, pero si un equipo puede vencer en el coliseo colchonero ese es el Barça. No obstante ya lo hicieron hace unas semanas en el partido de ida de las semifinales de Copa. Ahora es otra competición pero la motivación y las ganas son las mismas, o incluso más.

Pues el pinchazo del Real Madrid en Valencia ha dejado la clasificación mucho más comprimida. Cuando desde la capital ya se daban por contados esos tres puntos ante los blanquinegros, el varapalo ha sido tremendo para ellos. Todavía les queda un partido aplazado que jugar en Vigo, pero las sensaciones son que los de Zidane van cuesta abajo en este 2017 y a los de "Lucho" sólo les queda mejorar.