El entrenador del FC Barcelona, Luis Enrique, está cansado hasta tal punto de los intentos de desestabilización de algunos medios de comunicación que, al final, ya se los toma hasta con humor. Durante la rueda de prensa de este sábado en la Ciutat Esportiva de Sant Joan Despí, tras el entrenamiento del Barça, contestó con ironía a una pregunta de un periodista.

"Ja, ja, ja. Qué bonito, ¿no? Pues nada". Esa fue la respuesta de Luis Enrique cuando le preguntaron si realmente el vestuario había perdido la confianza en él, como habían publicado algunos medios de comunicación de la "caverna" mediática durante los últimos días.

Y es que, tras la debacle del FC Barcelona contra el Paris Saint-Germain en el Parque de Los Príncipes, parece que desde algunos sectores de la prensa están aprovechando para hacer sangre de la herida y hundir el Barça ahora que está "tocado" anímicamente.

Un sector de la prensa, a meter el dedo en la llaga

El objetivo podría ser el de sacarle de la lucha por LaLiga Santander con el Real Madrid. A día de hoy los culés son segundos en el campeonato a un punto del Real Madrid, aunque los blancos tienen todavía dos partidos aplazados.

Luis Enrique, en cualquier caso, tiene clara cuál es su metodología a seguir. "No he escuchado nada. No os escucho nunca, no lo voy a hacer esta semana, no me acerco a diez metros de un televisor o una radio ni borracho. Me avala mi trabajo y al que le guste bien y al que no también", comentó, combatiendo de esta manera las muchas críticas que ha recibido. Ahora, más que nunca, el Barça necesita estar unido.