Luis Suárez vuelve a pasar por un momento dulce en el FC Barcelona. El delantero centro había entrado en una pésima racha goleadora y de juego que había generado dudas sobre su figura e incluso sobre su presencia en el once. Pero su gol ante el Sevilla en LaLiga y sobre todo su doblete ante el Real Madrid en Copa del Rey para darle el pase a la final al Barça, han disipado todas esas dudas.

Pero el ex jugador del Liverpool tiene ya una edad y lleva tiempo sufriendo especialmente de su rodilla derecha. El uruguayo tiene problemas ahí y en el Barcelona quieren cuidarle para que no la fuerce demasiado. Pero el club azulgrana tiene malas noticias porque Uruguay ha convocado a Suárez para el próximo parón de selecciones que se celebrará entre el 22 y el 25 de marzo.

La selección charrúa jugará la llamada China Cup y se enfrentará a Uzbekistán el 22 de marzo y a China o a Tailandia en la final o en el choque por el tercer o el cuarto puesto. Se había especulado con que Suárez podría descansar en ese parón por sus problemas de rodilla, pero todo parece indicar que será uno más en la lista uruguaya.

La Asociación Uruguaya de Fútbol ha explicado en el comunicado donde dio la lista que la convocatoria definitiva se anunciará unos días antes del viaje, ya que ahora mismo hay 27 jugadores en la lista y de ahí no irán todos. "El plantel definitivo será confirmado en los días previos al viaje a China", decía el comunicado.

Con estas palabras puede darse a entender que el delantero del Barça todavía podría caerse de esa convocatoria, en el caso de que los problemas en su rodilla fueran a más y el propio futbolista o el equipo barcelonista decidieran que lo mejor para él es descansar. Habrá que ver qué pasa al final y si Tabárez lleva o no a Suárez.

Suárez quiere seguir siendo decisivo en el Clásico

El ex del Liverpool o del Ajax ha recibido esta noticia horas antes de enfrentarse al Real Madrid en el Clásico de LaLiga. El charrúa, que fue el jugador más decisivo en el choque copero, espera volver a serlo en este de competición doméstica. Llega con ganas y con confianza y volverá a ser un quebradero de cabeza para la defensa madridista.