Fue el fichaje más caro del FC Barcelona en el pasado mercado veraniego, pero Malcom no lo está teniendo fácil en el Camp Nou. Con apenas 21 años, y aunque ha dejado algún chispazo de calidad, le ha tocado empezar desde la suplencia su aventura en la Ciudad Condal, algo que no le ha desanimado y que no ha menguado ni una pizca la ilusión que tiene de triunfar como azulgrana.

Así lo ha confesado él mismo en una entrevista con los medios oficiales del club, en la que se ha 'mojado' sobre su estreno como miembro del conjunto catalán. Una de las cuestiones principales ha sido su relación con Ernesto Valverde, que exige mucho a los recién llegados y sólo les da entrada en la dinámica del equipo cuando les ve realmente preparados.

"Con Valverde estoy muy bien, hablé con él y me dijo qué necesitaba para mejorar, está muy bien nuestra relación", ha señalado el brasileño, que en todo momento ha subrayado que nunca hubo enfrentamiento con el entrenador aunque ha dejado claras sus intenciones: "Quiero jugar partidos difíciles para demostrar al míster que tengo calidad para estar con el grupo".

En este sentido, ha sido cuestionado por su debut en la Champions, remememorando un enfrentamiento soñado contra el Inter de Milán: "No me importa si son ocho o diez minutos, para mí debutar en la Champions es cumplir un sueño de niño, y además marcando... Quedará en la memoria de mi carrera para siempre".

"Imaginé que podría marcar en la Champions, pero no así, contra un equipo tan fuerte. Cuando recibí la pelota de Coutinho, dije 'Voy a encarar' porque siempre nos lo pide el míster. Luego, chuté porque quería terminar la jugada. Fui muy feliz por marcar y debutar tan bien", recuerda con una sonrisa el de Sao Paulo.

Además, ha señalado que su familia lo está viviendo con la misma emoción, algo que ya recalcó tras anotar en el Trofeo Joan Gamper y que volvió a ocurrir en el Giuseppe Meazza: "Llamé a mi madre, que estaba llorando, porque sabe que desde pequeño decía que quería jugar una Champions con el Barcelona. Desde que tenía 9 ó 10 años, mi sueño siempre era una Champions con el Barça".

Malcom está encantado con los jugadores del Barça

Otro de los aspectos que ha destacado Malcom ha sido la unión de la plantilla, a la que ha calificado en varias ocasiones como una "familia": "Me estoy adaptando y aprendiendo a hablar un poco de castellano. Todo es como una familia, todos quieren lo mejor para el otro. Hacemos muchas bromas en el vestuario, y la relación que tengo con mis compañeros es cada vez mejor".

"Estoy siempre con los brasileños, con Coutinho, Arthur, Rafinha también. Entonces, estamos siempre juntos. Hablo más con ellos, pero estoy bien con todos. Hablo con Leo, Suárez, Piqué, Alba... Con todo el mundo", ha revelado, apuntando a que ya es uno más y que es cuestión de tiempo que mejoren sus resultados sobre el césped. Está absolutamente convencido.