Aunque no se le pudo reprochar demasiado a Philippe Coutinho este miércoles, al haber jugado su primer partido tras recuperarse de una lesión que le mantuvo apartado entre dos y tres semanas de los terrenos de juego, la versión gris que demostró contra el PSV Eindhoven no sería noticia si no fuera porque ya son varios los partidos consecutivos en los que el brasileño decepciona.

'Cou' anda algo falto de chispa en las últimas semanas, puede que meses. El brasileño no acaba de encontrarse sobre el terreno de juego, y a pesar de que posee un talento innato, le está costando traducirlo en fluidez para el juego del FC Barcelona. Contra el PSV Eindhoven volvió a estar algo espeso en las combinaciones, en los regates y sobre todo en las decisiones rápidas.

Esa frescura mental es lo que parece haber perdido Coutinho últimamente, y lo que deberá volver a recuperar para ofrecer su mejor rendimiento sobre los terrenos de juego. Ante el PSV Eindhoven intentó combinar con Leo Messi y el resto de sus compañeros, y se sacó de la chistera también alguno de sus típicos tiros desde fuera del área.

Pero la mayoría de sus pases fueron horizontales, poco profundos o interceptados por los jugadores rivales, mientras que sus tiros también andaron faltos de precisión contra la portería de Zoet. La mejor versión de Coutinho no ha llegado tras la recuperación de su lesión, y da la sensación de que el brasileño se ha contagiado de las imprecisiones del resto del equipo.

El Barcelona echa en falta la fluidez y velocidad que suele aportar sobre los terrenos de juego, y el hecho de que se trate también de un 'tapado' a la hora de marcar y generar peligro hacia la portería contraria. El grifo de goles de Coutinho se ha cerrado en las últimas semanas, y aunque el jugador intenta volver a abrirlo, no le está resultando nada fácil.

Coutinho no aguanta los noventa minutos al máximo

Para colmo, Valverde tuvo que cambiarle contra el PSV Eindhoven al estar el brasileño agotado en la segunda parte. Los parones de varias semanas sin jugar le afectan mucho, al tener un físico que no suele aguantar al mejor nivel durante los noventa minutos. Coutinho y el Barça deberán trabajar en mejorar esa puesta a punto, y el jugador, a nivel personal, necesitará reflexionar para sacar a relucir pronto su mejor juego.