Munir El Haddadi ha sido presentado como nuevo jugador del Alavés y en la rueda de prensa ha reconocido que ha vivido un verano complicado por la indefinición de su futuro. El futbolista cedido por el Barça ha confesado que nadie del club le dijo nada y ha pasado unos días complicados hasta conocer el destino final. 

"Ha sido un verano más difícil que el del año pasado. Nadie me decía nada y tenía que seguir entrenando. Tuve que esperar hasta el final para saber mi futuro", ha descrito Munir de forma sincera. Y es que aunque llegó a jugar en el Gamper sabía que no tenía hueco en la primera plantilla azulgrana.

Munir ha comentado también qué opina de su llegada al Alavés: "Sé que aquí puedo crecer. Me gusta el equipo y la ciudad, estoy seguro de que podré ayudar al Alavés", ha analizado el ariete, que curiosamente podría haber jugado hace unos días contra el Barça si su cesión se hubiera formalizado antes. 

Cree que es un reto interesante, ni mucho menos baja un escalón en su carrera: "No es un paso atrás, es una motivación más. Seguro que me irá muy bien y aprenderé mucho", ha explicado Munir, para añadir: "Sólo me quiero centrar en el fútbol y dejar de escuchar y sentir lo que se dice".

Compañero de Bojan y reto goleador

Munir coincidirá en Vitoria con otro ex azulgrana, Bojan. 'Es un gran jugador. Coincidí con él en una pretemporada en el Barça, es un gran jugador y una gran persona', ha confesado el hispano-marroquí, que ha reconocido que le gustaría jugar de delantero centro. El reto, muy claro: 'Me veo preparado para ser la referencia ofensiva. Espero llegar a los 15 goles."