El FC Barcelona es consciente a estas horas que su cantera le ofrece margen de maniobra. Entre los chicos del filial que están haciendo la pretemporada se encuentra Fabio Blanco, extremo de la generación 2004 con condiciones para ayudar a corto plazo y tener futuro en la elite. El propio Xavi Hernández ya destacó su progresión en el filial el pasado mes de abril reconociendo que estaba siendo decisivo con goles, jugando "en banda y por dentro".

Precisamente esa buena evolución le ha llevado estar trabajando con el primer equipo en esta pretemporada. El atacante de Almería es consciente de que la oportunidad es única. Ya sin Adama y mientras se resuelve el futuro de Ousmane Dembélé, cada vez más cercano a renovar, la posición de extremo reclama jugadores con velocidad, desborde y pegada.

Fabio llegó al Barça en enero, en un movimiento de mercado bastante inteligente. Los responsables culés lo sacaron del Eintracht de Frankfurt por una cantidad mínima firmando a una de las 'joyas' de su generación. En trece partidos con el filial desde el invierno, marcó cuatro goles y sólo se perdió algunos encuentros por covid, enfermedad que le restó participación al principio.

Llamando a la puerta 

Esta es la segunda pretemporada de Fabio al máximo nivel. El pasado verano estuvo con el Eintracht, donde dejó partidos muy interesantes. El extremo llegó hace poco más de un año a Alemania desde el Valencia como apuesta fuerte del Eintracht. Un cambio de poder en la dirección deportiva del club le hizo perder fuerza y en enero apareció la posibilidad de ir al Barça, que siempre había mostrado interés.

Blanco multiplica las opciones del Barça. El club puede aprovecharlo como alternativa para los extremos, como pieza importante del ‘B’, con las puertas del primer equipo abiertas, o utilizarlo como pieza de mercado para tener ingresos.