La vida da muchas vueltas, y por ello nunca se debe hablar antes de tiempo. No fueron pocos los aficionados culés que criticaron a Paulinho y al propio FC Barcelona por cerrar el fichaje del centrocampista brasileño este pasado verano. un jugador de 29 años, que estaba jugando en el Guangzhou Evergrande de China y sobre quien no se conocía demasiado bagaje en Europa.

Cierto es que Paulinho no tuvo demasiado encaje en el Tottenham y sí triunfó en cambio en Corinthians, además de con la selección de Brasil, pero aun así el Barça apostó por su fichaje al llevar años siguiendo de cerca sus evoluciones y saber, de sobras, que se trata de un jugador cuyo potencial puede aportar cosas que la plantilla azulgrana necesitaba hasta ahora.

Llegada desde segunda línea, capacidad defensiva, destrucción del juego rival y juego entre líneas son algunas de las grandes cualidades de Paulinho, algo que ya ha empezado a demostrar en el FC Barcelona. Con los tiempos que corren y lo mucho que se ha 'inflado' el mercado de fichajes, puede que no haya sido mal negocio pagar la cláusula de 40 millones de euros del brasileño.

Paulinho llega pisando fuerte al Barça

La temporada 2017-18 acaba de empezar y a Paulinho todavía le queda mucho por demostrar para justificar su fichaje y el alto precio que pagó el Barça, pero de lo que no hay duda es de que el jugador está comprometido al cien por cien, motivado para intentar ganar títulos importantes y con muchas ganas de cerrar la boca de quienes le han criticado.

Su calidad es indudable, y Ernesto Valverde tiene plena confianza en sus prestaciones. No se fichó a Coutinho, Seri, Verratti, Draxler, Di María ni a ningún otro de los muchos centrocampistas que sonaban para el Barça en el centro del campo, entre ellos N'Zonzi. No se sabe cómo habrían encajado en el caso de haber aterrizado en el club. Lo que sí está claro, sin embargo, es que de momento Paulinho sí está encajando como anillo al dedo.