Paulinho Bezerra se ha ganado, y de qué manera, a la afición del FC Barcelona por su gran entrega, sus goles y el espectacular rendimiento general que está aportando al equipo. El centrocampista brasileño se ha convertido en un hombre esencial en los planes de Ernesto Valverde, tanto por su físico como por su llegada al área.

Sin embargo, el fichaje de Philippe Coutinho podría acabar perjudicando el gran rendimiento que está ofreciendo el hombre de los 40 millones de euros, teniendo en cuenta que sus virtudes de llegada desde segunda línea podrían verse con menos frecuencia.

Este domingo en Cornellá-El Prat, contra el RCD Espanyol, el brasileño actuó en la posición de interior, sin tanta libertad como en otras ocasiones para subir al ataque y colocarse junto a Luis Suárez como segunda referencia del FC Barcelona.

La presencia de Coutinho y Alcácer como acompañantes de Luis Suárez dificultó la capacidad de sorpresa de Paulinho apareciendo desde atrás, y el brasileño se vio obligado a jugar más en el centro del campo, con pases cortos y enfrentándose a algunos regates y combinaciones complicadas para él, teniendo en cuenta que no tiene la misma técnica que sus compañeros en la sala de máquinas.

Paulinho vio mermadas sus virtudes

El punto más fuerte de Paulinho son sus llegadas al área desde la segunda línea. Ernesto Valverde había otorgado hasta ahora total libertad de movimientos al centrocampista brasileño, que ha abarcado una zona muy amplia del campo con la tranquilidad de tener a tres centrocampistas por detrás de su posición como lo son Iniesta, Rakitic y Busquets.

Este domingo las cosas cambiaron, y el rendimiento de Paulinho en el centro del campo, al menos durante la primera hora de juego, no fue el mismo que el nivel del resto de la temporada. A veces, cuando se toca alguna pieza se compromete a otra, y Paulinho no ofrece las mismas garantías de interior que de enganche cerca de los jugadores de ataque. Seguro que Valverde tomará nota.