El FC Barcelona sufrió un empate inesperado este jueves contra la UD Las Palmas en el Estadio de Gran Canaria, y aunque es cierto que los de Ernesto Valverde no mostraron la superioridad necesaria como para ganar cómodamente al conjunto canario, sí merecieron el triunfo frente a uno de los últimos clasificados de LaLiga Santander 2017-18.

Y lo cierto es que el Barça lo habría conseguido de no ser por Mateu Lahoz, que entendió unas manos involuntarias de Digne en el interior del área como penalti. Así lo señaló, y Calleri lo transformó. Gerard Piqué, que se quedó en el banquillo para descansar este jueves, no pudo contener sus protestas justo después del pitido final de Mateu Lahoz.

Carles Naval tuvo que llevarse a Piqué

Debido a ello, fue a recriminar al mismo Mateu Lahoz el penalti inexistente que había señalado, y el delegado del FC Barcelona, Carles Naval, tuvo que llevarse de la escena a Gerard Piqué para que el rifirrafe y las protestas del central catalán no fuesen a más.

La realidad es que el zaguero azulgrana se jugó una posible sanción del Comité de Competición, curiosamente en un partido que no jugó para estar descansado de cara al encuentro del próximo domingo contra el Atlético de Madrid en el Camp Nou. 

El Barça se la jugará contra el Atlético

En cualquier caso, Carles Naval se llevó a tiempo a un Piqué que, como muchos barcelonistas, terminaron el partido muy enfadados con Mateu Lahoz, quien no sólo influyó al señalar un penalti inexistente sino que, además, no expulsó al portero de la UD Las Palmas al filo del descanso, cuando repelió un balón fuera del área con las manos en una pugna con Luis Suárez

En definitiva, está claro que el arbitraje de Mateu Lahoz y el desenlace del encuentro entre Las Palmas y Barcelona dará mucho que hablar durante los próximos días. O al menos hasta que llegue el partido del domingo entre Barcelona y Atlético de Madrid.