El FC Barcelona afrontará durante los meses de enero, febrero y marzo la etapa clave de la temporada 2018-19, aquella en la que pecó la campaña pasada de carácter conservador, a la hora de utilizar a la mayoría de sus pilares básicos en prácticamente todos los partidos. Este año 2019, Ernesto Valverde ha aprendido del error, y fomentará las rotaciones para no cargar físicamente a sus jugadores en exceso.

Es por ello que el FC Barcelona utilizará a más suplentes habituales en los partidos de Copa del Rey -los jugadores que menos minutos han tenido a lo largo del presente curso- para centrar sus esfuerzos en aumentar la distancia al frente de la clasificación de LaLiga Santander 2018-19 y, por supuesto, en avanzar de ronda en la UEFA Champions League.

El FC Barcelona tiene claras cuáles son sus prioridades, y además esta temporada dispone de una plantilla más elaborada y profunda que hace un año. Todo de cara, por tanto, para que el 'Txingurri' gestione con solvencia las alineaciones de los próximos 21 partidos, los que deberá jugar el Barça si sigue escalando rondas en Copa del Rey y Champions League, antes de que llegue el próximo parón de selecciones.

Dicho periodo comprenderá los meses de enero, febrero y marzo, dado que no será hasta el día 18 de este último mes cuando los jugadores del Barcelona se dispersen para jugar con sus respectivos combinados nacionales. Al Barça le espera un mínimo de 15 partidos, 11 de Liga, dos de los octavos de Champions League y otros dos de los octavos de Copa, y un máximo de 21.

Sale a una media de dos partidos por semana, por lo que Valverde apenas tendrá tiempo para dedicarlo a entrenar. El rodaje de los jugadores se llevará a cabo más en los partidos oficiales, como suele ocurrir en competiciones de otros deportes como la NBA de baloncesto.

El Barça y Valverde deben ser inteligentes

En este punto, la clave para Valverde será encontrar el equilibrio perfecto entre 'titulares' y 'suplentes' por dos razones bien distintas, pero igual de importantes: la primera, que los pilares imprescindibles no lleguen fundidos a los meses de abril y mayo; la segunda, que los jugadores con menos minutos dispongan del rodaje suficiente para marcar las diferencias y jugar a gran nivel cuando les toque vestirse de corto.

Un equilibrio complicado, pero con el que Ernesto Valverde buscará sacar el mayor beneficio posible a nivel de victorias y títulos para el FC Barcelona. El conjunto culé quiere aspirar esta temporada al triplete, y no sólo se ganará con buen juego... También hará falta inteligencia.