El entrenador del FC Barcelona, Ernesto Valverde, seguro que se tomará la derrota sufrida este domingo contra el Real Betis como una oportunidad para aprender de los errores, y también como un impulso para poner más énfasis en la mejora de la fiabilidad defensiva en los entrenamientos, a fin de que el FC Barcelona frene la 'sangría' de dianas que está recibiendo esta temporada.
Que el Barça no está bien en defensa es algo que salta a la vista, viendo los 18 goles que ha encajado ya el conjunto culé en LaLiga Santander 2018-19, y que superan incluso los 16 de un Leganés que está en puestos de descenso. Para cristalizar estas malas sensaciones en un dato, cabe decir que esta es la primera derrota liguera del FC Barcelona de Ernesto Valverde en el Camp Nou.
Desde que el 'Txingurri' tomó las riendas del primer equipo la pasada campaña 2017-18, el FC Barcelona no había perdido jamás un partido de LaLiga Santander en el Camp Nou. Sí había empatado y había sufrido contra muchos rivales, pero casi siempre conseguía sacar los compromisos adelante y, como mínimo, empatar en el marcador.
Para encontrarnos con la anterior derrota que había sufrido el Barça en el Camp Nou, en Liga, hay que remontarse a la jornada 3 de LaLiga 2016-17, cuando bajo el mando de Luis Enrique el FC Barcelona cayó derrotado en el santuario culé ante el Deportivo Alavés (1-2).
Fue una derrota también por la mínima, en la que los culés dispusieron de ocasiones para igualar el marcador, aunque no tan abultada ni contundente como la de este domingo. Y es que el Betis pudo ampliar incluso la ventaja en más de una ocasión, y el FC Barcelona no transformó el 3-4 hasta el tiempo de descuento, fruto de una jugada en la que tuvo que intervenir el VAR.
Valverde, obligado a encontrar la fórmula de una buena defensa
Ernesto Valverde, en definitiva, ya sabe lo que es perder con el FC Barcelona en el Camp Nou, en un partido de LaLiga Santander. Y ahora que lo sabe y ve que no le gusta, a ciencia cierta pondrá todo su empeño en que la escena no se vuelva a repetir. Tendrá dos semanas para descubrir cómo, hasta que termine el parón de selecciones de noviembre y todo, esperemos, regrese a la normalidad. Hay que seguir ganando.