La derrota del domingo en la ida de la Supercopa de España ha obligado al Barça a reaccionar sin apenas tiempo para lamentarse, y es que este mismo miércoles los catalanes deben afrontar el partido de vuelta. Además de los desajustes defensivos que acabaron condenando a los azulgranas, los de Valverde echaron de menos algunas ideas en ataque, donde faltaron atrevimiento, desborde, y bastante precisión.

Precisamente, estas son algunas de las características que se ha llevado Neymar, que en su marcha al PSG ha dejado un hueco importante en el once titular barcelonista. Su presencia durante la gira ha dejado poco margen al entrenador, que ha tenido que buscar soluciones de urgencia en una plantilla a la que todavía no ha llegado un sustituto de garantías.

Aunque sí aterrizó en la Ciudad Condal un canterano con muchas ganas de tener minutos, Gerard Deulofeu falló en su primer intento por demostrar su valía en el Barça, y es que en el Camp Nou al de Riudarenes le pesó demasiado la camiseta. Acostumbrados a verle regateando, encarando y siendo muy atrevido, el catalán se mostró demasiado tímido.

Sus pases al área no encontraron casi nunca rematador, y Carvajal tomó mucha ventaja en su enfrentamiento particular, algo que no ocurrió cuando fue sustituido por Denis Suárez. El gallego, también apto para arrancar desde el extremo, revolucionó un encuentro en el que su equipo intentó sobrevivir gracias a su intensidad, al pundonor de Luis Suárez y a los chispazos de Messi.

Luchando por el puesto

Ahora será Ernesto Valverde quien decida el futbolista que arrancará desde el flanco izquierdo del ataque, uniéndose al argentino y el uruguayo como principal arma del Barça en el Santiago Bernabéu. El extremeño podría repetir con Deulofeu si entiende que el catalán es un especialista, aunque el delantero deberá rendir mucho más si no quiere quedar de nuevo señalado.

Otra opción sería invertir los papeles y darle la titularidad a Denis Suárez, que se desenvolvió con más descaro en los minutos que tuvo en el Camp Nou. Cualquiera de las opciones que elija el Txingurri -que también podría optar por una sorpresa-, debe tener claro que toca desfondarse para intentar la remontada, y que a las ayudas en defensa deberá añadir una claridad de ideas que faltó en casa. Hay un nuevo reto en marcha.