Nunca es sencillo cruzar el 'charco' para unirse a un equipo nuevo, en un entorno distinto y con compañeros diferentes y Vitor Roque ha tenido que enfrentar este desafío a mitad de temporada al incorporarse a un Barça que no atraviesa su mejor momento. A pesar de que el brasileño ha demostrado desde el principio su compromiso con el equipo y no ha presentado dificultades de integración en el vestuario, su compatriota Raphinha ha asumido el papel de su 'padrino' en la Ciudad Condal, ayudándolo a adaptarse e, incluso, enseñándole algunas palabras en español.

Aunque es cierto que el hecho de ser los únicos dos brasileños en la plantilla puede haber facilitado la integración, el extremo está plenamente involucrado en la adaptación del 'Tigrinho' y está ganándose el respeto de la afición culé. Parece que el club ha confiado en que el '11' asuma esta responsabilidad, y hasta el momento, está cumpliendo con las expectativas. El extremo ha acogido a su compatriota, incluso compartiendo lugar en el vestuario, justo al lado de Lewandoski.

Además, el exjugador del Leeds no solo está facilitando la integración de Roque en el vestuario, sino que también está cultivando una sólida amistad con él. Según informa SPORT, el extremo se está comprometiendo no solo en guiar al recién llegado en aspectos profesionales, sino también en brindar consejos extradeportivos como doonde buscar vivienda en Barcelona o hasta desempeñar el papel de profesor de castellano, enseñándole algunas palabras clave del español para que poco a poco se vaya familiarizando con el idioma.

Raphinha se ha convertido en el 'canguro' del Tigrinho

De hecho, su contribución no se detiene ahí. Raphinha también ejerce como taxista para el '19' azulgrana y durante varios días ha ido a recoger a Vitor a su hotel para llevarlo a los entrenamientos. El exjugador del Palmeiras ha encontrado en su compatriota un sólido punto de apoyo para integrarse en Can Barça, permitiéndole soltarse gradualmente y hacer más llevaderos sus primeros días en la capital catalana.

Hasta ahora, el ariete de 18 años ya ha debutado ante Las Palmas, jugando algunos minutos que le permitieron tener oportunidades claras y mostrar su deseo de marcar goles con la camiseta azulgrana, en gran parte gracias a la cálida recepción que ha tenido en el vestuario del Barça. El 'carioca' está ansioso por triunfar con el FC Barcelona, y sin duda, su compatriota Raphinha lo respaldará tanto dentro como fuera del campo.