El FC Barcelona ha chocado de frente con la cruda realidad: su estilo de juego no es suficiente para competir con equipos de primer nivel. Después de una serie de victorias al inicio de este 2024, venciendo a UD Las Palmas (1-2), UD Barbastro (2-3) y Osasuna (2-0), finalmente tuvo que enfrentarse a un rival 'pesado' como el Real Madrid, quien expuso todas y cada una de las debilidades del cuadro azulgrana.

El dominio del juego por parte del combinado merengue fue tan abrumador que al descanso ya tenían el compromiso prácticamente resuelto, con un contundente 3-1 y un Vinícius Júnior 'endiablado' que logró convertir un 'hat-trick' ante una defensa culé que no tuvo su mejor día. A pesar de la ventaja relativamente cómoda en el electrónico, aún quedaban 45' y en un Clásico nada puede darse por sentado. Especialmente considerando que el combinado catalán ha respondido en más de una ocasión cuando se le han 'apretado las tuercas' desde el vestuario.

Xavi no 'agitó' al vestuario en el descanso del Madrid-Barça

No obstante, según informa 'AS', la charla de Xavi Hernández en el descanso estuvo lejos de ser un llamado enérgico a cambiar el curso del partido. La referida fuente sostiene que, dada la pobre actuación del FC Barcelona en la primera mitad, los jugadores esperaban que el de Terrassa se mostrara furioso como lo hizo en el descanso del partido contra el Almería, golpeando cosas y gritando a todo pulmón. Pero al final, eso no sucedió.

El egarense, en el entretiempo del enfrentamiento entre madrileños y catalanes, parecía tener poco interés en hablar, limitándose a dar instrucciones precisas, instando a sus jugadores a comprometerse con el club y poco más. De hecho, un testigo citado por la fuente afirmó que Hernández parecía haber perdido la motivación.

Finalmente, el equipo no logró revertir la situación y su actitud en el campo no fue la más adecuada, tanto que la segunda mitad fue un mero trámite en el que el Real Madrid anotó otro gol, pero nada más que eso. El Barça se mostró apático y sin soluciones, ante la inminente pérdida del primer título de la temporada, ahora deberá empezar a enderezar rápidamente el rumbo si no quiere dejar escapar los certámenes que aún tiene por disputar. Desde ya, el combinado blaugrana debe centrarse en sus retos más cercanos: el cruce de Copa del Rey contra el Unionistas de Salamanca (18/01) y el partido de LaLiga contra el Real Betis (21/01).