Antes de que la dispersión vuelva a apoderarse del FC Barcelona principios de noviembre, y de que los jugadores internacionales vuelvan a concentrarse con sus respectivas selecciones para afrontar un nuevo parón, el conjunto entrenado por Ernesto Valverde deberá afrontar una gran acumulación de partidos en pocos días, correspondientes a las tres competiciones regulares que disputa el Barça esta temporada.

Entre los seis partidos que deberá jugar el Barça, se encuentran dos citas consecutivas cuanto menos complicadas, al jugarse en dos de los campos tradicionalmente más complicados de Europa. Tras el empate cosechado este pasado sábado en el Wanda Metropolitano contra el Atlético de Madrid, los jugadores deberán hacer todo lo posible por volver a concentrarse de cara a los retos complicados que se darán a partir de mediados de este mes de octubre, tanto en LaLiga Santander como en la UEFA Champions League.

Y es que el FC Barcelona, que hasta ahora no había tenido que viajar a campos tremendamente complicados en ninguna de las dos competiciones, empezará a tener que dar un plus extra de rendimiento para ganar los partidos como visitante.

Después de afrontar el encuentro contra los del 'Cholo' Simeone, el Barça jugará esta próxima semana dos partidos seguidos como local, ante Olympiacos en Champions League y Málaga en Liga, que teóricamente deberían ser saldados con victoria asequible en el Camp Nou.

El Barça, a cerrar el mes con tres salidas

A partir de ahí, tres partidos fuera de casa para cerrar el mes. El primero será en la primera ronda de la Copa del Rey contra el Real Murcia, en principio el más fácil de todos y que no debería suponer ningún problema para los de Ernesto Valverde, aunque jueguen con una alineación formada por suplentes habituales y jugadores del Barça B.

Más cuidado deberán tener los culés, eso sí, de cara a los dos partidos siguientes: tocará medirse al Olympiacos en Grecia, donde el campo será una auténtica olla a presión a prueba de sangre fría. Y, unos días más tarde, tocará viajar hasta La Catedral para jugar la décima jornada de Liga contra el Athletic de Bilbao, un equipo que siempre pone las cosas difíciles a los blaugrana, sobre todo en su propio terreno de juego.

Para culminar el 'tourmalet' particular de partidos, justo antes de la llegada del parón de selecciones de noviembre, el Barcelona deberá medirse en el Camp Nou contra el Sevilla de Berizzo, que se está mostrando irregular esta temporada pero siempre es un rival a tener en cuenta. Tendrá que andarse con ojo, pues, un Barça que ha conseguido unos grandes resultados hasta ahora... Y que espera seguir cosechándolos.