Varios medios británicos afirman que Abramovich no piensa en la destitución del técnico luso aunque no la descarta en caso de seguir con el actual récord negativo de derrotas. El uno a cero en contra ante el Stoke City podía haber sido su sentencia, pero no ha sido así

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El entrenador del Chelsea, José Mourinho, está cumpliendo a cada jornada que pasa con más récords negativos para el club londinense. Otra derrota más esta vez ante  el Stoke y que hace cuestionarse su posición al frente del cuadro "blue" para todo el mundo menos para el máximo mandatario de la entidad, Roman Abramovich. El ruso parece querer que el míster siga, aunque no se sabe durante cuánto tiempo.

Y es que el entrenador portugués está llevando a su equipo a la debacle. Ya son decimosextos a tres puntos del descenso. Frente al Stoke de Bojan sumaron su séptima derrota esta campaña, un dato esclarecedor de lo mal que le va al actual campeón de la Premier League. El entrenador no estuvo presente en el último encuentro debido a la sanción que tenía pendiente.

Eso sí, los aficionados siguen creyendo en él y eso le da el crédito suficiente delante de Abramovich para seguir. Al dirigente se le achacó un despido prematuro del entrenador la primera vez que ocupó el banquillo del equipo inglés, por lo que esta vez esperará hasta que la situación sea insostenible. Y ya comienza a serlo sobre todo vien por una parte que puede haber un motín de sus jugadores, revelado la semana pasada, y por los resultados.

Al término del encuentro en el Britannia Stadium los jugadores visitantes Asmir Begovic y Kurt Zouma salieron a la zona mixta para darle su apoyo público al míster. Sin embargo otras informaciones internas parecen demostrar todo lo contrario. A todo ello hay que sumarle que el Chelsea está llevando la peor defensa del título liguero de la historia de la competición. Los próximos partidos ante el Norwich y el Tottenham serán cruciales para su futuro... O tal vez no.