El delantero camerunés Albert Ebossé, jugador del JS Kabylie y máximo goleador de la Liga de Argelia, con 17 dianas, ha fallecido este sábado tras recibir un golpe en la cabeza de una piedra lanzada desde la grada por su propia afición. Ese día había sido padre

Ebossé, de 24 años y que había sido padre esa misma mañana, recibió una pedrada mortal después del partido que su equipo perdió ante el USM Argel por 1-2, con gol suyo. El jugador fue trasladado al hospital, pero murió de camino al centro hospitalario por un traumatismo craneoencefálico. La Confederación Africana de Fútbol (CAF) ha pedido que se promuevan "sanciones ejemplares" para los responsables de la muerte. El presidente del organismo, Issa Hayatoy, ha contactado con las diferentes asociaciones de fútbol para actuar en contra de la violencia y llevar ante la ley a los culpables.

"Mis pensamientos están con la familia y los amigos de este joven jugador que disfrutaba de su trabajo pacíficamente. El fútbol africano no puede ser en absoluto el caldo de cultivo de estos actos vandálicos. Esperamos una sanción ejemplar contra este acto tan grave de violencia", aseguró.