Xavi Hernández ha colgado este lunes las botas definitivamente en el encuentro que su equipo, el Al Sadd, perdió por 2-0 ante el Persepolis. El catalán no se pudo marchar con victoria, pero jugó los 90 minutos y volvió a dar una 'master class' en el centro del campo. Fue la última de Xavi en un día que probablemente nunca olvidará.

El Persepolis, el rival de los de Xavi en el encuentro, le rindió un sentido homenaje antes de la disputa del choque. Para sorpresa de todo el mundo, le entregaron una camiseta del club con el dorsal número seis y con su nombre. Además, también le dieron una simbólica alfombra, muy típica de esa zona. Todo el mundo ovacionó al de Terrassa, que saludó y evitó emocionarse antes del partido.

No fue la tarde del Al-Sadd, que no se encontró cómodo desde el pitido inicial. El Persepolis fue mejor y al final confirmó sa superioridad con las dos dianas que marcó a lo largo del encuentro. Xavi fue uno de los pocos que creó peligro en su equipo y fue el hombre que generó la mayoría de oportunidades de las que dispusieron los suyos.

El catalán subió antes de ese partido un post a Instagram en el que habló de cómo se sentía antes de decir su último adiós como futbolista profesional. En el FC Barcelona se convirtió en uno de los mejores centrocampistas de la historia y en un jugador que marcó la diferencia en el centro del campo e hizo del Barça uno de los mejores equipos de siempre.

El mensaje más emotivo de Xavi

"Hoy es el último partido de mi carrera como futbolista. Todavía recuerdo cuando era un niño: la ilusión de jugar al fútbol, de tocar el balón, de disfrutar con mis hermanos, mi hermana y amigos en cualquier partidillo. Hoy con 39 años todavía disfruto del fútbol profesional con la misma ilusión de entonces", explicó en su mensaje el ex internacional español.

Para terminar, el ya ex jugador quiso darle las gracias al fútbol por todo lo que le ha dado. "Es por eso que simplemente puedo decir: ¡GRACIAS! Muchísimas gracias al fútbol y a todas las personas que han formado parte de mi vida personal y futbolística. Añoraré mucho, muchísimo, la sensación de tocar el balón en un estadio", concluyó.