En el FC Barcelona hay consenso: Ansu Fati necesita continuidad y confianza. El cuerpo técnico y la dirección deportiva valoran positivamente que el jugador encuentre minutos en un entorno favorable, y el Mónaco es visto como una buena opción.

Eso sí, queda cerrar el aspecto económico. La operación se plantea como una cesión con opción de compra, cifra que podría situarse en torno a los 20 millones de euros, según ha informado Fabrizio Romano. No se descarta que el club monegasco asuma parte o la totalidad de la ficha del jugador.

Ansu Fati ya ha tomado una decisión

El delantero del FC Barcelona, de 22 años, ha comunicado a su agente Jorge Mendes su deseo firme de jugar en el AS Mónaco la próxima temporada. El club del Principado es su prioridad y, según fuentes cercanas, encaja perfectamente con su estilo de juego y aspiraciones deportivas.

Durante un almuerzo en Barcelona entre Fati y Mendes, repasaron las ofertas disponibles. De todas ellas, el Mónaco es la única que ha despertado auténtico entusiasmo en el jugador. El estilo ofensivo de Adi Hütter, la participación en la Champions League y la posibilidad de volver a sentirse protagonista han inclinado la balanza.

Por qué el Mónaco seduce a Ansu Fati

El actual "10" del Barcelona busca algo más que minutos: quiere recuperar su mejor versión en un entorno competitivo, pero no traumático. El Mónaco, equipo que esta temporada venció al Barça en dos ocasiones —una de ellas en el Trofeu Joan Gamper—, le ofrece justo eso: protagonismo, balón y gol.

Su estilo dominante, basado en la posesión y la presión alta, se ajusta mejor a las cualidades de Fati que otros destinos donde se privilegian los contragolpes, un terreno donde el jugador ha perdido chispa tras las lesiones.

Jorge Mendes negocia con Laporta el futuro de Ansu… y Lamine Yamal

El agente portugués Jorge Mendes tiene previsto reunirse con Joan Laporta para cerrar dos carpetas importantes: la cesión de Ansu Fati y la renovación de Lamine Yamal. Mientras que lo de Yamal va por buen camino, la salida de Fati depende aún de ajustes contractuales, pero ambas partes coinciden en que habrá fumata blanca en los próximos días.

Después de años de expectativas desbordadas y lesiones inoportunas, Ansu Fati parece haber entendido que para volver a ser el que fue, primero debe dejar de ser quien es hoy en el Barça.

El Mónaco no es un paso atrás: es una curva bien tomada en un camino que aún puede llevarle muy lejos. Porque a veces, para volver a casa como estrella, hay que marcharse como promesa. Ansu Fati elige poner rumbo a la Ligue 1. El Barça también ve con buenos ojos su salida.