Pierre-Emerick Aubameyang fue elegido como el peor jugador del Chelsea en la derrota contra el Arsenal, en su primera titularidad en seis meses. No es casualidad, tampoco sorpresa. El jugador ha quedado en el ostracismo y si situación parece que no mejorará hasta que finalice la temporada, porque no 'justificó' la confianza de Frank Lampard en los 45 minutos que estuvo sobre el terreno de juego. 

El gabonés fue intrascendente en el partido contra el Arsenal, su exequipo, y no ha hecho más que aumentar su crisis en el Stamford Bridge, a donde llegó procedente del FC Barcelona el pasado verano. No pudo hacer valer la ley del ex, todo lo contrario, y se le notó la falta de ritmo y de 'fútbol' después de haber jugado únicamente 75 minutos en los últimos diez partidos antes del derbi londinense. 

Aubameyang, desesperado en Londres

Lo cierto es que la situación del futbolista de 33 años ha llegado a ser desesperante. Está esperando el momento en el que acabe la temporada para hacer sus maletas y entiende que el Chelsea, después de un año para el olvido, le dará facilidades para salir. Tiene contrato hasta el verano de 2024, pero lo más probable es que le otorguen la carta de libertad para que pueda decidir su futuro. 

El Barça sigue siendo su opción favorita de cara al futuro y en el club le ven como la mejor alternativa 'low cost' para reforzar su delantera y tener un suplente para Robert Lewandowski, sobre todo después de que descartaran -prácticamente- la incorporación de Vitor Roque por lo elevado de su precio de traspaso. Hay buena sintonía entre ambas partes, pero será un tema que se discutirá cuando comience el mercado de fichajes o, al menos, al finalizar presente temporada. 

Condenados a entenderse

Según una información del diario 'SPORT', Aubameyang quiere regresar al Spotify Camp Nou y negociará su salida 'amistosa' del Chelsea. Entiende que puede 'jugar' con la postura del club inglés, que no cuenta con él, para que le dejen salir con destino al cuadro azulgrana totalmente gratis. Posteriormente, llegará el momento de las negociaciones con el Barça. 

De acuerdo a esta información, el futbolista está dispuesto a bajarse su sueldo con tal de regresar a la Ciudad Condal y pondrá todas las facilidades para poder completar el movimiento, aunque es consciente de que actualmente son muchos los problemas que tienen los catalanes con el 'fair play' financiero y que la operación podría cocinarse a fuego muy, muy lento.