Oriol Romeu está siendo uno de los grandes protagonistas de la actualidad del FC Barcelona, aunque no por motivos positivos. Se ha desvelado que el club ya ha comenzado a evaluar la posibilidad de salir al mercado de fichajes invernal para conseguir un mediocentro que pueda servir de 'competencia' o complemento para el jugador formado en La Masia, puesto sus actuaciones en el último mes le han dejado bastante señalado. Había firmado un buen comienzo de curso, acompañado constantemente por Frenkie de Jong, pero ahora son más las dudas que certezas. 

En los últimos días se han revelado más detalles sobre el proceso que vivió el Barça antes de elegir al de Ulldecona como el relevo de Sergio Busquets. Merece la pena recordar que, cuando el de Badia comunicó que no iba a extender su contrato, la dirección deportiva comenzó la búsqueda para conseguir a un jugadr que fuese capaz de llenar el 'hueco' que iba a dejar y fueron muchas las alternativas que estuvieron en la agenda. Martín Zubimendi y Joshua Kimmich eran los grandes favoritos, pero 'costaban' 60 millones de euros cada uno y para los blaugrana era imposible desembolsar esa cantidad. Todavía lo es. 

Se evaluaron las alternativas de Marcelo Brozovic y Soyfan Amrabat, pero también acabaron siendo descartados por factores económicos y deportivos. 'Relevo' ha añadido que Dani Parejo fue la última alternativa, junto a Oriol Romeu, pero acabaron descartándole a última hora. Y es que no hay que pasar por alto que, antes del comienzo de la pretemporada blaugrana, el jugador del Villarreal estuvo muy vinculado con un movimiento a la Ciudad Condal, pero acabó en 'nada', a pesar de que era un perfil que le gustaba mucho a Xavi Herrnández y era una opción 'lógica' para relevar a Sergio Busquets. 

Dani Parejo era una gran opción para el Barça

Y es que el centrocampista estaba en una situación idónea para el Barça. Le quedaba un año de contrato con el Villarreal y eran muchos los rumores que apuntaban a que los de Castellón no descartaban su venta a un buen precio para descartar que se marchase, un año después, como agente libre. La opción estaba sobre la mesa y era muy bien valorada por el entrenador egarense, pero acabó decantándose por la posibilidad de fichar a Oriol Romeu, a quien él había pedido expresamente a la dirección deportiva en aquel momento. Terminaron fichándole por alrededor de 3,4 millones de euros, una 'ganga'. 

Dani Parejo está, actualmente, en conversaciones para extender su estadía en La Cerámica, pero parece ser una operción que dependerá de lo que consiga el Villarreal en esta temporada. En cualquier caso, hay que destacar que fue el Barça el que descartó su incorporación y no al revés. Finalmente, el hecho de que Romeu fuese formado en La Masia tuvo mucho más peso y venía más que justificado por su rendimiento en su último año en el Girona, que fue bastante positivo.