El FC Barcelona cerró el mercado de fichajes de invierno hace un par de días y desde entonces ha puesto en marcha su 'operación renovación'. Con los jóvenes como Gavi y Araújo ya asegurados, más allá de la postura inflexible de LaLiga, el club azulgrana acordó con Marcos Alonso, y trabaja en las propuestas de Sergi Roberto, Busquets y ahora ya en la de Ousmane Dembélé.

El francés, ahora mismo en la enfermería, se ha convertido en un futbolista indispensable para Xavi Hernández y con su actual acuerdo finalizando en el verano de 2024, el Barça tiene toda la intención de retenerle. El galo tiene una cláusula actual de 50 millones de euros (durante junio y julio), pero ni el jugador ni el club piensan en un cambio de aires, por lo que la renovación es el objetivo principal de todos.

'Mundo Deportivo' ha informado este viernes que en los despachos culés ya trabajan en concretar una primera reunión con el representante del atacante, Moussa Sissoko. La idea sería tener un primer encuentro con el agente para abordar su continuidad después de que el cuerpo técnico azulgrana esté muy contento con el rendimiento y el compromiso de Dembélé

La información igualmente aclara que aún no existen conversaciones contractuales, pero el Barça quiere cerrar la ampliación para evitar que la cláusula de rescisión baje de 100 a 50 'kilos' durante el verano. Clubes como el Chelsea o PSG no dudarán en poner los millones sobre la mesa y sobre todo ofrecer primas desorbitadas a jugador y agente para que cambien de idea. 

Una postura que esperan que siga igual

Sin embargo, Dembélé ya dejó claro con sus declaraciones que está contento y feliz en el Barça, que su intención no es abandonar el club y que por su cabeza solo pasa ampliar su contrato. Xavi ha mimado al jugador y le ha convencido de que puede ser un futbolista determinante si se concentra en lo realmente importante, y los resultados están allí.