Neto Murara ha sido uno de los candidatos a salir del FC Barcelona durante este mercado estival. Su elevada ficha está fuera de la nueva política salarial de la institución, por lo que están por la labor de conseguirle un nuevo destino antes de que arranque la gira por Estados Unidos. Sin embargo, la postura del guardameta ha sido inamovible y sus deseos pasan por mantenerse en la disciplina culé hasta el final de su contrato.

Con un año restante en su acuerdo, varios club se han interesado en adquirir sus servicios en estas últimas semanas. El último sería el Celta de Vigo tras el regreso de Matías Dituro al fútbol chileno. Los gallegos quieren un portero titular y verían con 'buenos ojos' la incorporación del brasileño después de que Xavi Hernández comunicará que no contará con él en su proyecto deportivo.

Eso sí, en caso de que las negociaciones empiecen a funcionar los de Balaídos pondrían la condición de que el portero aterrice en Galicia con la carta de libertad debajo del brazo. Esto haría que el Barcelona deba rescindirle el contrato a Neto y pagarle la cantidad que le resta por cobrar en su acuerdo. Otra opción sería trabajar en una cesión en la que los culés asuman la mitad de su ficha, aunque resulta un escenario poco probable más no descartable.

En todo caso, desde Vigo no contemplan la posibilidad de pagar un solo euro en su traspaso, por lo que el balón estaría sobre el tejado del Barça a poco más de una semana de que comience la pretemporada en suelo norteamericano.

Efecto dominó

En sus tres campañas como blaugrana apenas ha disputado doce compromisos, siendo opacado totalmente por Marc-André ter Stegen. Su estadía en Catalunya genera un efecto dominó que afecta el crecimiento de Iñaki Peña y Arnau Tenas, quienes apuntan a ser los metas del futuro. Peña viene de una cesión en Turquía y sería un paso atrás en su carrera volver a ser tercer portero, o en dado caso titular en el filial. Por su parte, Tenas quiere tener garantías y minutos, pero todo dependerá de la salida del jugador 'canarinho'.