Si alguien creía que tras gastarse cerca de 400 millones en el último mercado de fichajes el Paris Saint-Germain iba a poner freno a sus ambiciones parece que estaba equivocado, y más después de la últimos rumores que apuntan al conjunto francés. Después de armar un equipo para aspirar a la Champions, ahora querría protagonizar un trueque rocambolesco... ¡Con el FC Barcelona!

Según el diario 'El País', fuentes cercanas a la escuadra 'bleu' han confirmado que en la secretaría técnica nació una idea que fue trasladada a Nasser Al Khelaïfi, y que estaría encaminada a garantizar la permanencia de un Neymar al que todavía ronda el interés del Real Madrid, dispuesto a convertirle en su referencia a pocos años vista.

Tras sus sonadas disputas con Edinson Cavani, el problema sería ahora su amigo Kylian Mbappé, al que consideraría una amenaza de cara a la conquista del Balón de Oro. Así, para aparcar las especulaciones y contentar a su gran apuesta, los parisinos estarían dispuestos a aceptar una exigencia que ya se jugó con los azulgrana, la de aumentar la comunidad brasileña en el vestuario.

Y para tratar de satisfacer su voluntad, el objetivo sería ni más ni menos que Philippe Coutinho, al que pretenderían intercambiar por el joven delantero francés. La amistad que el de Río de Janeiro guarda con el de Sao Paulo viene de muchos años atrás, y ambos se han considerado en varias ocasiones como "hermanos".

El Barça no quiere negocios con el PSG

Pese a que no acaba de quedar claro quien sería el que añadiría un montante económico además del traspaso del jugador, no parece que la operación sea factible, más cuando los catalanes han encontrado en su nuevo brasileño a una referencia dentro y fuera de los terrenos de juego. Olvidado el interés por Kylian Mbappé, por el que podrían haber apostado hace unos meses, el nuevo objetivo para el ataque parece apuntar a Antoine Griezmann.

Por si fueran pocos los inconvenientes, el principal es que el Barça no quiere hacer negocios con el PSG, después de varias discusiones complicadas por Marco Verratti o el propio Neymar, que han acabado con denuncias cruzadas y una tensión en los despachos que viene de algunos enfrentamientos en el terreno de juego. Si llaman a la puerta por Coutinho, se llevarán un 'no' de los culés, además del que ya les 'regaló' el futbolista cuando intentaron torpedear su aterrizaje en el Camp Nou.