El FC Barcelona se reforzó durante el pasado mercado de invierno con los servicios de Pierre-Emerick Aubameyang, quien llegó al club a coste cero y se ganó inmediatamente el cariño de la afición azulgrana. El gabonés fue protagonista absoluto en las alineaciones de Xavi Hernández, siendo el máximo goleador del equipo en la segunda mitad de la temporada.

Las sensaciones sobre su continuidad eran buenas debido a que Memphis Depay estaba en el radar de la Juventus. Los italianos buscaban un '9' con sus características durante el verano pasado, además de que el propio jugador quería cambiar de aires debido a que disminuyó sus minutos a causa de las lesiones y el buen momento de 'Auba' con el gol.

Sin embargo, fueron las negociaciones con la Juve lo que frustró la continuidad del africano en el Spotify Camp Nou. La dirección deportiva y el propio entrenador contaban con el africano y tenían reservado un rol importante para él durante esta campaña, ya que entraría en constante rotación con Robert Lewandowski y con el resto de futbolistas ofensivos del plantel.

No obstante, el Barça esperaba que Memphis acordará su salida con la 'vecchia signora' y así liberar su dorsal y ficha, lo que ayudaría con el Fair Play financiero de LaLiga y permitiría la continuidad de Aubameyang. A pesar de ello, el problema se derivó por las altas pretensiones económicas del neerlandés, que día tras día aumentaba sus exigencias al punto que los transalpinos terminaron por romper las negociaciones.

Principio del fin

El desinterés de la Juventus por el ex Olympique Lyon terminó sentenciando la estadía de 'Auba', ya que el Barcelona no podía permitirse contar con los dos delanteros por motivos financieros. El Chelsea apareció en escena para llevarse al '9' mientras que Depay, que continúo en el ostracismo, decidió partir a Madrid tan solo cuatro meses y medio después.