El FC Barcelona vivió un verano muy intenso en materia de fichajes, pero la ventana invernal también trajo un revuelo importante a los despachos del Camp Nou. Uno de los culebrones de la plantilla fue la salida de Arda Turan, que se solucionó con una cesión al Istambul Basaksehir. Además, los catalanes trabajaron en la negociación con el pensamiento de asegurarse una venta.

Y es que el paso del centrocampista por la Ciudad Condal será recordado por todo menos por sus éxitos, y más después de las complicaciones que vivió a lo largo de sus temporadas como azulgrana. Más allá de su falta de integración, al de Fatih se le recriminaron, entre otras cuestiones, el poco interés que tenía por hacerse un sitio en el equipo y la falta de compromiso que exhibió durante sus últimos meses. 

Es por eso que su vuelta a Turquía se interpretó como un beneficio para todas las partes. Tras deshojar la margarita, el ex del Atlético accedió, y los culés pudieron quitarse de enmedio un problema en el vestuario, un gran sueldo y tratar de recuperar parte de la inversión en su llegada.

Además de la opción de compra de la que dispone el Basaksehir y de algunas cláusulas variables por su rendimiento, el Barça insistió en un asunto. Desde el momento en que se oficializó el acuerdo, a Arda Turan se le puede vender sin discusión, es decir que cualquier oferta que el club considere adecuada deberá ser aceptada por el futbolista.

Esto supone un gran paso adelante en su desvinculación definitiva, dado que hasta ahora había bloqueado algunas de las propuestas por su interés en apurar su carrera en una liga competitiva. Eso sí, por el camino se perderá un porcentaje de lo que se pueda sacar, ya que en el próximo verano los turcos se quedarían con un 20% de su traspaso y en el siguiente con un 25.

La oportunidad que desaprovechó Arda

Pese a que su fichaje costó cerca de 40 millones de euros, Arda Turan nunca ha demostrado su valía en el Barça, y tanto club como jugador perdieron grandes oportunidades en un pasado reciente. El fútbol chino ve con buenos ojos al centrocampista de Fatih, y ha realizado varias ofertas superiores a los 30 'kilos'. Ahora los azulgrana las ven con añoranza, porque se darían por contentos si acaba dejando apenas 10 en caja. Habrá que ver si ese tren vuelve a pasar.