Desde que saliese en la prensa catalana que el FC Barcelona podría estar interesado en el fichaje del defensor David Alaba, muchos clubes parecen haber comenzado a moverse en este aspecto. Las buenas temporadas del internacional austriaco en el Bayern de Munich han hecho que sea seguido por varios clubes importantes y quizás este verano haya decidido salir de Alemania.
Todo puede ser debido a la salida de Pep Guardiola del equipo teutón. Con el catalán al mando, Alaba ha sacado todo lo bueno que lleva dentro y ha demostrado ser ya no solo un buen lateral, sino también un excelente central e incluso mediocentro. Es decir, un defensor polivalente y aguerrido de los que le gustan a Luis Enrique.
Es por ello que no es de extrañar que la secretaría técnica, en la búsqueda de un defensa central contrastado y ante los problemas que puede dar el fichaje de Aymeric Laporte o John Stones, haya preferido tirar por otro camino. Robert Fernández, conocedor de los gustos de su entrenador, podría haberle puesto el ojo a un David Alaba que destaca, además de lo expuesto, por otras importantes facetas del juego.
Es un referente en este Bayern de Munich, es un portento físico y, además, tiene una grandísima técnica. Todo ello junto a su tremendo golpeo de balón también aparece una perfecta lectura del juego en todo momento del partido. Un hombre que con Heynckes empezó de lateral zurdo, enamorando ya por aquel entonces a media Europa, y que ahora se ha asentado en el centro de la zaga.
Todo esto ha hecho que importantes clubes de la Premier hayan comenzado a sondear su fichaje. El mismo Manchester City que entrenará Guardiola el próximo curso podría preguntar precio por él. El Real Madrid también se apunta al carro para tratar de renovar una defensa donde Florentino espera hacer limpieza. Y luego está el Barça. El mejor equipo del mundo que si consigue un nuevo triplete será una opción muy difícil de rechazar para el zaguero.