La gran progresión de Denis Suárez en su segunda temporada lejos de Can Barça le ha valido para sacarse el billete de vuelta al Camp Nou. Después de gustar en el Sevilla de Unai Emery, pero donde no gozó del rol de titular indiscutible, ahora en el Villarreal de Marcelino ha acabado de explotar todas sus virtudes. El crack de 22 años es un fijo en el esquema del equipo valenciano, donde ejerce las funciones de jugador creativo con las de cierre defensivo.

Y es que en El Madrigal ha pulido mucho su juego. Ahora Denis es un futbolista más centrocampista de ida y vuelta, luchador, que presiona y se deja el alma en el campo. De extremo izquierdo, como llegó al Barça B, al interior que es ahora ha pasado todo un mundo. El gallego ha sabido adaptarse a las necesidades de su equipo y su entrenador y las ha sumado a sus características.

Es por todo ello que tiene como loco a Luis Enrique, un hombre que quiere a futbolistas así en su mediocampo. Sólo hay que ver a Andrés Iniesta y a Ivan Rakitic y el cambio que han pegado durante este último año y medio. Hombres que se entregan a la causa, que ocupan huecos y que son inteligentes. Todo eso es lo que tiene Denis Suárez, unido a su buen golpeo de pelota, habilidad en la conducción y mucha, mucha calidad.

Es por todo ello que, según apunta "Catalunya Migdia Esports", los directivos del Barça Albert Solé y Raül Sanllehí le habrían ya comunicado al Villarreal su decisión de hacer efectiva la cláusula de tres millones para recomprar al futbolista. Una decisión de buen seguro acertada.