El mercado de fichajes ha arrancado con mucha fuerza en LaLiga, que tiene a sus clubes como grandes animadores de la ventana estival. Además de grandes como FC Barcelona, Real Madrid o Atlético, la clase alta, media y baja del campeonato español lleva tiempo trabajando en asegurar refuerzos, aunque la entrada en escena de algunos competidores ha complicado negocios casi cerrados.

Este jueves se anunciaba que Valencia y Celta de Vigo tenían prácticamente hecho el trueque entre Maxi Gómez y Santi Mina. El 'Faro de Vigo' aseguraba que el uruguayo pondría rumbo a Mestalla y el español regresaría a Balaídos, a donde llegarían también 14,5 millones de euros -y 1,5 en variables- y la cesión del joven Jorge Sáenz, que compensarían la diferencia de valoración entre todos los implicados.

Pero según 'Superdeporte', la aparición del West Ham podría 'reventar' la operación, ya que los londinenses ofrecerían más dinero a la entidad 'celeste' y también al futbolista. El ariete estaba convencido de dar el salto y se había dejado querer por el actual campeón de la Copa del Rey, aunque ahora estaría a la espera de las novedades que llegan desde los despachos.

El problema para los 'che' es que el agente del charrúa estaría pidiendo una comisión más elevada, la que correspondería al cierre de un acuerdo con los 'hammers'. Jonathan Barnett, representante, entre otros, de Gareth Bale, se vería notablemente beneficiado si Maxi se marchara a la Premier League, por lo que ha paralizado un trato al que sólo le faltaban las firmas.

Al conjunto valencianista se le acumula el trabajo para cerrar la delantera con la que afrontará el próximo curso, ya que además de resolver casos como la posible salida de Rodrigo Moreno, también tiene pendientes algunas incorporaciones. Las alternativas al punta olívico serían Borja Iglesias -que está cerca del Real Betis- y Willian José.

El Barça no se moverá por Maxi Gómez y Santi Mina

Tanto Maxi Gómez como Santi Mina fueron fichajes valorados por el Barça, pero no parece que ninguno de los dos vaya a acabar en el Camp Nou. Los azulgrana también tienen entre sus prioridades apuntalar el frente de ataque, pero las condiciones deportivas y económicas de sus traspaso no acabaron de convencer a los responsables de la planificación barcelonista.