El fichaje de Ousmane Dembélé con el FC Barcelona llegó tras una estratosférica cantidad de dinero pagada al Borussia Dortmund por un futbolista que, de cara al futuro, tiene todas las cualidades para convertirse en una auténtica estrella mundial.

Por desgracia, Ousmane Dembélé tuvo la mala fortuna de lesionarse el pasado 16 de septiembre en el campo del Getafe, y tras tres meses de recuperación, estará listo para volver a ser alineado por Ernesto Valverde a partir del próximo mes de enero de 2018, seguramente ya en la ida de octavos de la Copa del Rey contra el Celta de Vigo en Balaídos.

Pero, si bien algunos jugadores fueron fichados para cuajar un "rendimiento inmediato" en el FC Barcelona, este no es el caso de Dembélé. El barcelonismo no podrá exigir maravillas ni un nivel de juego descomunal a Dembélé durante sus primeras semanas tras la recuperación de la lesión, dado que eso serviría para poner todavía más presión sobre sus hombros.

De hecho, desde el diario 'Sport' llegan a asegurar que la entrada de Dembélé en las alineaciones del FC Barcelona será progresiva, por lo que parece muy improbable que Valverde le coloque como titular en el once que salga a jugar la ida de octavos de Copa del Rey frente al Celta, y seguramente tampoco en la siguiente jornada de LaLiga Santander 2017-18.

Habrá que tener paciencia con Dembélé

El regreso de Dembélé al FC Barcelona debe ser progresivo, y con el paso del tiempo se prevé que se convierta en un futbolista indiscutible en las alineaciones de Valverde. A sus 20 años, Dembélé tiene mucho por aprender y asimilar tanto a nivel futbolístico como psicológico, y es por ello que el aficionado culé deberá tener paciencia con él hasta que pueda desarrollar su mejor fútbol.

En el seno del club no dudan de sus cualidades, y no en vano se pagaron este pasado verano alrededor de 145 millones de euros por su fichaje. Dembélé está destinado a convertirse en uno de los mejores jugadores del mundo, pero a largo plazo.