Riqui Puig ha sido uno de los futbolistas con el futuro más incierto de cara a la próxima campaña. El de Matadepera quiere triunfar en Barcelona, pero Xavi Hernández entiende que lo mejor para su crecimiento es que encuentre un nuevo destino, al menos por esta temporada. La irrupción de Gavi y Nico en la medular le han dejado en el ostracismo, más aún con la incorporación de Franck Kessié como nuevo refuerzo a 'coste cero'.

Entre los clubs que han sonado para adquirir sus servicios está la Fiorentina, aunque las últimas declaraciones de su director deportivo, Daniele Pradè, han derrumbado las opciones del catalán de recalar en la Serie A. En una rueda de prensa ofrecida por el ejecutivo, y desveladas por el periodista Fabrizio Romano, se encargó de desmentir el interés del club por el centrocampista del Barça.

"Riqui Puig no nos interesa, nunca ha estado en nuestra lista. Queríamos fichar a Florian Grillitsch pero luego tuvimos algunos problemas", apuntó el representante de la 'viola'. Además, también habló de otro de sus futuribles, quien aterrizará en suelo trasalpino proveniente del Real Madrid. "Estamos en negociaciones por Luka Jović del Real Madrid, esperamos cerrar el trato pronto. También con Dodó del Shakhtar", afirmó.

De esta manera, los azulgrana y el entorno de Riqui deberán evaluar nuevas opciones para definir su futuro. Ya el '6' ha aceptado salir en busca de minutos y nuevos desafíos, pero mantiene en su lista de objetivos la posibilidad de volver y convertirse en protagonista en el Camp Nou. Tanto el Benfica como el Valencia han mostrado interés, y serán los próximos días los que dictarán sentencia sobre el nuevo destino del mediocentro.

¿Renovación a la vista?

Aunque su carrera parece apuntar lejos de Catalunya, lo cierto es que el club considera indispensable renovarle antes de abrirle la puerta de salida. Con 22 años, su contrato finaliza en 2023, por lo que no sería una decisión sabia dejarle salir sin mantenerle 'atado' al menos por una campaña más. Desde el seno culé consideran que todavía tiene buena proyección y que su condición de agente libre, una vez culmine una hipotética cesión, le convertirán en un activo asequible para media Europa.