El FC Barcelona ha cerrado la marcha de Rafinha, la segunda de la 'operación salida' que empezó con el fichaje de Arda Turan por el Estambul Başakşehir FK. El hispanobrasileño era uno de los jugadores que hubiese tenido menos protagonismo por la reciente incorporación de Philippe Coutinho a la plantilla dirigida por Ernesto Valverde.

La operación se habría cerrado con una cesión hasta final de temporada y una opción de compra al terminarla de 35 millones de euros más tres en concepto de variables. Sin embargo, el FC Barcelona se ha asegurado de que la opción de compra sea algo parecido a obligatoria.

El acuerdo estipula que el Inter de Milán estaría obligado a quedarse a Rafinha en propiedad en el caso de clasificarse para la Champions League del año que viene. Algo que es muy probable, ya que el equipo neroazzurro es tercero en la clasificación y parece uno de los grandes favoritos para volver a Europa. 

El Inter de Milán pagará la ficha

El Inter de Milán se hará cargo de la totalidad de la ficha del centrocampista hispanobrasileño y, a partir de julio, la intención es firmar al jugador por tres años más. Rafinha estuvo lesionado durante nueve meses y el Inter, pese a ser conocedor de la calidad del jugador, quiere guardarse un seguro para su estado físico haciendo que la opción de compra no sea obligatoria a no ser que se cumplan los objetivos.

De esta forma, el FC Barcelona ha conseguido sacar rendimiento económico de uno de los futbolistas que no contaban para el técnico Ernesto Valverde de cara a lo que resta de temporada.