Luis Suárez cumplió 32 años el pasado mes de enero y, desde hace un año y medio, sufre problemas en su rodilla, aunque recientemente ha sido operado para intentar solucionarlos. Pese a ello, el delantero uruguayo ha visto como su estado físico solamente le permite rendir al máximo nivel de manera intermitente, por lo que el FC Barcelona buscaría en el mercado a un '9' que permitiese dosificarle.
A día de hoy, hay varios nombres sobre la mesa. En primer lugar, el de Antoine Griezmann vuelve a acercarse al Camp Nou como posible fichaje estelar. No obstante, paralelamente a la posible llegada del delantero francés, en el Barça se plantea la incorporación de otro delantero con perfil de '9' para tener distintas opciones en ataque.
Entre todos esos nombres y, según las informaciones publicadas por el diario 'Sport' este mismo domingo, se asoma el nombre de Rodrigo Moreno. El delantero del Valencia, a sus 28 años, conoce perfectamente el campeonato y estaría en la lista de futuribles del FC Barcelona como posible refuerzo, dado que el equipo culé tendría ciertas ventajas para convencer a la entidad 'che'.
Esas ventajas tienen nombres propios: Jasper Cillessen y Denis Suárez. Ambos futbolistas interesan al Valencia y el FC Barcelona estaría dispuesto a negociar por ellos, ya que el gallego no tiene sitio en el equipo y el holandés ha pedido marcharse al ver que no tiene opciones de ser titular de forma habitual. Podrían entrar en la operación del delantero valencianista.
Rodrigo interesa especialmente porque es un delantero que no solamente se puede situar en el eje del ataque, sino que su versatilidad le permite también moverse por ambas bandas. Esa polivalencia encandila a la dirección deportiva, además de la calidad y el olfato de gol de un futbolista que estaría decidido a abandonar Mestalla.
De Ligt y Griezmann, por delante
A día de hoy, las grandes prioridades del FC Barcelona son dejar cerrados los fichajes de Matthijs de Ligt, defensa del Ajax de Ámsterdam que el club ya hace tiempo que se sigue, y de Griezmann, cuya incorporación se frustró el pasado verano. Si se cierran los dos fichajes, se podría abrir la ventana de Rodrigo, al que habría que convencer ya que no estaría dispuesto a convertirse en un nuevo 'caso Alcácer'.