Ronald Araújo ha sido protagonista, este lunes, de una charla en 'Jijantes' con el periodista Gerard Romero, en la que ha repasado su actualidad y el buen momento que vive en el FC Barcelona, donde se ha convertido en el gran líder a nivel defensivo. El charrúa está en un estado de forma sensacional y, con actuaciones como en Vila-Real, lo ha comprobado. 

El central ha aprovechado para elogiar a sus compañeros, sobre todo Gavi, Pedri o Christensen, pero también ha sido cuestionado sobre cuáles fichajes deberían llegar al Barça en la próxima ventana de transferencias y no se ha 'guardado' nada con respecto a sus recomendaciones, porque ha recomendado el regreso de Leo Messi y Rodrigo Betancur, su compatriota y compañero en la selección uruguaya. 

En concreto, cuestionado por a quién ficharía si él fuese Mateu Alemany, dijo que "a Rodrigo Betancourt y Leo Messi", mientras que del excapitán blaugrana señaló que "sería algo tremendo y especial [que regresara al Barça]. Nos encantaría. Su calidad como jugador y persona es espectacular. Es un jugador diferencial, el mejor jugador del mundo". 

También ha hablado sobre Gavi y Pedri, destacando que "Pedri es Harry Potter, alucino con lo que hace en el campo, es pura magia, y Gavi es especial, todos sabemos lo que es, no tiene ninguna maldad, es sólo su manera de jugar, es intenso. En los entrenamientos también da alguna patada que otra", mientras que de su 'socio' Andreas Christensen ha dicho que "lo conocía. Me alegro que esté con nosotros. Es un grandísimo jugador".

Post-Mundial y regreso a la acción

El central charrúa, de 23 años, ha hablado sobre la selección de Uruguay y lo que supuso no poder jugar en el Mundial: "Fue un momento muy duro, que me generó mucho estrés porque quería ayudar a la selección. Me dijeron que si no me hubiera operado, mi carrera se hubiera podido ver muy perjudicada porque eso podría acabar mal pegado. Llegué a tener esperanzas de jugar el Mundial, tenía claro que si pasamos a la fase de grupos podría estar. Recibí muchas presiones porque el club no quería correr ningún riesgo". 

Por ello, a su regreso a la Ciudad Condal vivió una situación muy estresante y tuvo que pedir una 'pausa', razón por la que se ausentó de la dinámica azulgrana por una semana extra, para poder desconectar con su familia: "Por eso me dieron una semana para estar con mi familia en Uruguay", sentenció.