El FC Barcelona llevaba meses sabiendo que Jasper Cillessen no quería continuar en el club y que esperaba irse este mismo verano. Los culés empezaron a buscar un relevo para el holandés hace tiempo y tuvieron varios nombres encima de la mesa antes de decidirse por Neto. Uno de ellos fue el de Jordi Masip, ex canterano blaugrana.
El portero del Real Valladolid llegó al Barça con solo 15 años y estuvo en la cantera hasta el 2014, cuando ascendió oficialmente al primer equipo para ser el tercer arquero. Llegó a debutar con el Barcelona en partido oficial, pero en el club no tenían clara su renovación y en el año 2017 se decidió que lo mejor era dejarle marchar para que buscase acomodo en otro equipo.
Masip acabó en el Valladolid y en Pucela se ha convertido en indiscutible y en uno de los metas españoles con más nombre de LaLiga Santander. Su rendimiento estas últimas temporadas ha sido excelente y por eso Josep Maria Bartomeu y la secretaría técnica culé se plantearon su vuelta cuando estaban buscándole reemplazo a Cillessen.
El catalán acababa contrato en 2020 y podría haber salido, tal y como indica Mundo Deportivo, por unos cinco millones de euros. Un precio muy asequible para un guardameta en plenitud, que conocía la casa y que conocía LaLiga. Con el fichaje de Masip, además, el club se aseguraba traer a un canterano en una época en la que hay aficionados molestos por la poca presencia de la cantera en el primer equipo.
Los barcelonistas no llegaron a hacerle una oferta al Valladolid y el futbolista renovó hace poco su contrato con los vallisoletanos. Su agente, Oscar Font, aseguró que hubo varios equipos que preguntaron por su representado, pero no quiso dar ningún nombre. "Varios clubes de Primera se han interesado, pero su primera opción siempre ha sido renovar con el Valladolid, donde se siente querido y valorado", explicó.
La oportunidad inesperada de Neto
El Barça no contaba con que un portero como Neto quisiera salir del Valencia para ser segundo en el Camp Nou. En el momento en el que desde el conjunto azulgrana vieron que esta opción era viable, dejaron de trabajar en otras opciones y se centraron en la llegada del brasileño. El Valencia se interesó por Cillessen a su vez y la operación resultó ser relativamente sencilla para ambos equipos.