El polémico agente, Mino Raiola, es uno de los representantes más famosos del mundo del fútbol. En el FC Barcelona lo conocen desde hace ya muchos años y siempre que pueden evitar tratar con él, lo hacen. Raiola era el agente de Ibrahimovic en su etapa en el conjunto culé (lo sigue siendo) y la experiencia que tuvo el club con él no fue nada buena.

Pero, a pesar de todo, el Barça sabe que el mundo del fútbol es así de complicado y que hay que tratar con gente como Raiola. Por eso, tal y como apunta Sport, en las próximas semanas el italiano viajará a Barcelona para tratar la renovación de Xavi Simons, uno de los canteranos más prometedores de la cantera blaugrana.

Pero es probable que del futuro de Simons no sea de lo único que se hable en esa reunión. Mino Raiola es el representante de Matthijs de Ligt. El joven central del Ajax es uno de los futbolistas más deseados de Europa y muchos grandes se están peleando por su fichaje. Uno de ellos sería el FC Barcelona.

Los dirigentes de la entidad barcelonista podrían aprovechar el viaje de Raiola a la Ciudad Condal para intentar acercar posturas con el central. De Ligt sigue sin haber decidido dónde jugar, pero según parece tendría predilección por los colores azulgranas. El Barcelona estaría esperando un gesto del defensor para lanzarse de lleno a por su fichaje.

Ese gesto, quién sabe, podría llegar por parte de Raiola en la reunión para ampliar el contrato de Xavi Simons. El Barça quiere a De Ligt, pero sabe que la competencia que hay por ficharle encarece mucho su fichaje y no entrará en una puja. Por eso quieren que tenga ese gesto que pueda provocar que el Ajax rebaje algo sus pretensiones y se acerque a la cifra que los culés esperan pagar por él.

El FC Barcelona tiene cubierto el puesto de central

De Ligt gusta mucho en el Barça, pero el equipo barcelonista no tirará la casa por la ventana. Gerard Piqué, Samuel Umtiti, Clément Lenglet y Jean-Clair Todibo son los cuatro centrales que tendrá Valverde la temporada que viene. Thomas Vermaelen podría marcharse y Murillo no seguirá. El holandés sería bienvenido, pero solo por un precio razonable, ya que la posición está muy bien cubierta.