El lateral derecho es una de las principales posiciones a reforzar en los próximos mercados de fichajes para el FC BarcelonaXavi Hernández y el cuerpo técnico culé tiene varios nombres en carpeta y uno de ellos es el joven Arnau Martínez, un futbolista formado en las categorías inferiores del Barça que se terminó marchando al Girona para seguir creciendo y llegar a Primera

A sus 19 años ha debutado esta temporada en LaLiga y ya ha tenido varias actuaciones importantes ante equipos como el Real Madrid, el Atlético o la Real Sociedad. Este ha sido el principal motivo por el que en el Camp Nou ha subido el nivel de interés por el defensor. Conscientes de su potencial y de que aún tiene margen para crecer, Xavi seguirá su progresión en la segunda parte de la temporada para un posible fichaje en verano. 

Arnau Martínez renovó con el Girona el pasado mes de enero con una cláusula de rescisión de 5 millones, que se transformaron en 20 con el ascenso. Un precio que se muestra más que asumible para el Barça, que busca hacer fichajes 'low cost' en los próximos mercados y que puedan encajar en la filosofía deportiva del club, además de tener una proyección importante. 

Un detalle más que importante es que el propio lateral nunca ha escondido su deseo de volver a su casa. Ya en una entrevista en 'Què T'hi Jugues' a principios de octubre dejó claro que "jugar en el Barça es un sueño que tengo desde pequeño". El futbolista podría ser la solución a un Héctor Bellerín que termina contrato a final de temporada y que no ha terminado de encajar desde su llegada a la Ciudad Condal el último día de mercado. 

Los inicios del nuevo objetivo

El Barça se fijó en defensor para incorporarse al Prebenjamín. Allí estuvo ocho años, hasta llegar al Infantil A, y coincidió con jugadores como Alejandro Balde y Xavi Simons. Al término de la temporada 2015/16, le comunicaron que no iba a continuar su formación en el club azulgrana, pero demostró que hay vida más allá del Barça y después de jugar dos años en el Hospitalet llamó la atención de los ojeadores del Girona, que decidieron ficharle para el Cadete A para después debutar con 17 años en el primer equipo en un partido de Copa del Rey en 2020.