El FC Barcelona cerró 2018 este sábado con buenas sensaciones, pero la llegada de enero 2019 mezclará las noticias deportivas con algunas de fichajes. En el camino hacia los títulos no van a faltar las especulaciones, y entre los casos pendientes hay uno que está lejos de resolverse y del que se lleva semanas hablando. Y podría alargarse bastante más.

Munir El Haddadi sigue hablando de renovación con el club, pero las posturas están distanciadas y las perspectivas, hoy por hoy, no son prometedoras. La última oferta para extender su vinculación no convenció al canterano, que presentó una respuesta hace días y está a la espera de una réplica de los responsables. Ha crecido en las últimas campañas y quiere que se valoren sus esfuerzos.

En el entorno de la entidad catalana hay sospechas de que el joven ya podría tener apalabrado un pacto para marcharse libre el próximo verano -acaba contrato en junio de 2019- pero sus agentes lo niegan y la negociación avanza lentamente. Eso sí, pese a los rumores recientes, varias fuentes indican también que su marcha en el mercado invernal no sería una opción, porque está convencido de seguir pese a querer mejorar sus condiciones.

El abanico de alternativas que tiene es muy amplio, ya que por él han preguntado conjuntos de España, Italia, Alemania, Inglaterra y Francia. Suenan con fuerza Real Betis y Celta de Vigo, pero Deportivo Alavés, Roma, Napoli, Schalke 04, Olympique de Marsella o West Ham también se han mencionado en su amplia lista de pretendientes.

Como algunas de las próximas altas y bajas del Barça, el caso Munir encontrará solución en los próximos meses, en los que se preparará la plantilla para la próxima campaña. Los técnicos no quieren perder opciones en una delantera que busca relevo a largo plazo para Luis Suárez, por lo que habrá que definir pronto cuál es el futuro del hispano-marroquí.

Valverde no quiere a Munir distraído

Quien no quiere entrar en líos es Ernesto Valverde, que envió a Munir a la grada en el último partido del año, en el que se quedó fuera de la convocatoria. Algunos apuntaron a que esto tendría que ver con su renovación, aunque más que un castigo podría tratarse de una medida para evitar que esté distraído en plena lucha por los títulos del curso. La cabeza debe estar al 100% sobre el terreno de juego.