Paulo Dybala fue el futbolista encargado de pasar por la sala de prensa en la previa del choque de la AS Roma ante Red Bull Salzburgo por los 16avos de final de la Europa League. Desde ese lugar el argentino intentó hacer su análisis del partido, pero también se tomó el tiempo para dejar abierto su futuro de cara al mercado del próximo verano.  

El campeón del mundo en Qatar se refirió a la cláusula de rescisión que existe en su contrato al tiempo que quiso remarcar su compromiso con La Loba y de seguir bajo las ordenes de José Mourinho. “La cláusula de rescisión afecta a mis agentes y al club, entonces no sé qué pasará a final de año. No sé qué será de mí, y mucho menos de Mourinho. Me gustaría que me entrenara él porque es uno de los mejores, me gustaría ganar con él, pero quiero ganar con la Roma", explicó el futbolista. 

Dybala llegó a la capital italiana después de no renovar su contrato con la Juventus y en verano podría ser una auténtica ganga para muchos clubes europeos. La Joya, según apuntan desde Italia, posee una condición de salida de sólo 12 millones de euros, aunque se eleva hasta los 20 'kilos' en caso de que sea un equipo italiano el que intente quedarse con el cordobés.

Por último, volvió a referirse a la conquista del Mundial de Qatar 2022 y cómo un sorteo puede cambiar la oportunidad de cada equipo de cara al objetivo final de quedarse con un nuevo título en su haber. “Ganar el Mundial es una de las mejores cosas, es lo mejor para un futbolista, pero son competiciones diferentes (en referencia a la Champions o Europa League), que no he ganado y me gustaría ganar", señaló. 

Muy poco riesgo

Dybala ha sido un futbolista que en varias etapas ha sido relacionado con el FC Barcelona, así como con el Real Madrid, Arsenal y Manchester United, y en verano son todos clubes donde podría encajar como delantero. Aunque no es un centrodelantero, sí en un segunda punta con gol y que puede reforzar muy bien una plantilla que necesite creatividad por una inversión bastante baja.