La dirección deportiva del FC Barcelona podría tener programada una cumbre con varios directivos del Valencia para tratar la incorporación de Jeremy Mathieu, que pese a estar a punto de cumplir 31 años sería uno de los grandes objetivos de Andoni Zubizarreta

De confirmarse la información publicada por "MD", la "profunda remodelación" que anunció el FC Barcelona a través de Josep Maria Bartomeu empezará a parecerse más a un deterioro de la plantilla que a una posible mejora. El rotativo catalán asegura que Andoni Zubizarreta y otros miembros de la dirección directiva tendrían prevista una reunión con el Valencia en pocos días para tratar el fichaje de Jeremy Mathieu -un carrilero zurdo reconvertido a central próximo a los 31 años-, que ya ha vivido sus mejores años de fútbol y para nada conseguiría tapar la enorme herida que hace sangrar al FC Barcelona en defensa desde hace tres temporadas.

Después de haber cerrado la contratación de Claudio Bravo -también 31 años- a cambio de 12 millones de euros, el siguiente objetivo en la agenda culé sería el fichaje de Mathieu después de haber recibido calabazas de parte del Paris Saint-Germain por Marquinhos y de que Mats Hummels haya cerrado la puerta a un traspaso este próximo verano. El defensa francés del conjunto "ché" ya sonó para el Barça el verano pasado cuando se desbarataron las negociaciones por Thiago Silva, pero parece que la "solución de emergencia" que estaría buscando el club no agrada ni mucho menos a la afición.

La llegada del magnate Peter Lim frenó momentáneamente las negociaciones con el Valencia, pero éstas se habrían retomado desde hace unos días y podrían estar a punto de llegar a su punto culminante en el caso de ser ciertas las últimas informaciones de "MD". El Valencia tendría interés en Cristian Tello, que podría entrar en la operación por Mathieu. El jugador galo, que no ha sido convocado con Francia para el Mundial de Brasil 2014, estaría tasado en alrededor de 10 millones de euros y llegaría como un "comodín". Si el de Sabadell fichara por el Valencia, sin embargo, no podría utilizarse para abaratar el fichaje de Koke Resurrección, con una cláusula de rescisión de 60 millones.