Agosto encara su recta final y el Barça aún tiene muchas cuentas pendientes en el mercado de fichajes. Desde la marcha de Neymar, los azulgrana sólo han conseguido certificar la llegada de Paulinho, y mientras luchan por desbloquear las incorporaciones de Philippe Coutinho y Ousmane Dembélé también apuntan a otros objetivos.

Entre estos últimos futbolistas se encuentra Jean Michaël Seri, una de las alternativas que los catalanes se plantearon al principio del verano pero que acabó desplazada tras las diferentes operaciones. Ahora, en las oficinas del Camp Nou estarían dispuestos a dar el paso definitivo, y si el Niza no accede a negociar, los culés optarán por comprar su salida.

A pesar de que no es habitual fuera de España, el marfileño sí incluyó en su contrato una cláusula de rescisión, por la que podría ser libre tras abonar 40 millones de euros. Tal y como ya ocurrió con Paulinho, si los franceses continúan negándose a escuchar ofertas, el Barça tendrá que rascarse el bolsillo para cerrar su fichaje por la vía rápida.

Más músculo

Aunque ya tiene al de Sao Paulo para desempeñar la función de pivote con llegada, la incorporación de Jean Michaël Seri cubriría otra vacante en la plantilla, la de un futbolista con virtudes de organizador pero con una buena capacidad física. El cuerpo técnico considera que el africano y el brasileño son complementarios, y el Barça tampoco descartaría a Philippe Coutinho en el caso de que finalmente el marfileño abandone el Niza.