El Barcelona daba por hecha la salida de Ousmane Dembélé en el mercado de traspasos. Con su contrato a una semana de expirar, tanto él como su entorno no han respondido a la oferta de renovación del club debido a que está lejos de sus aspiraciones económicas, aunque el discurso del francés continúa siendo que su deseo pasa por continuar defendiendo la elástica culé la próxima temporada.

Varios medios de comunicación han afirmado que el propio '7' habló con Xavi Hernández y le pidió que intercediera por él con la directiva, para que esta hiciera un último esfuerzo por cumplir sus exigencias financieras. Sin embargo, tanto Joan Laporta como Mateu Alemany han sido claros y se mantendrán firmes con su propuesta, aquella misma que le hicieron llegar a Moussa Sissoko en diciembre y que no sufrirá modificación alguna.

A pesar de ello, y como apunta 'Mundo Deportivo', este nuevo giro de guión ha tomado por sorpresa al Barça porque planificaban la siguiente campaña sin la presencia del 'Mosquito'. De hecho, en un vídeo que se hizo viral en redes sociales se puede apreciar al futbolista en Francia siendo preguntado por su futuro, a lo que este respondió que se siente bien en Barcelona y que sí continuará en la 2022/23.

No obstante, para seguir en la disciplina culé deberá rebajar sus expectativas y aceptar la oferta, la cual es a la baja debido a la nueva política contractual y salarial que está implementando la junta directiva. La propuesta sigue vigente y desde el seno de la institución creen que acabará aceptándola. En el club estarían encantados con su continuidad, sobre todo porque no existe otro jugador con sus características disponible en el mercado.

¿Qué pasará si se queda?

Si todo llega a buen puerto, el dinero destinado al fichaje de Raphinha será invertido para reforzar otros flancos de la plantilla, como la incorporación de Jules Koundé al eje de la zaga. Además, esta también dejaría fuera de los planes a Ángel Di María, quien se ofreció hace unas semanas por su condición de agente libre. La pelota ahora está en el costado de Dembélé, porque el Barça no modificará su hoja de ruta a menos que decida quedarse en la Ciudad Condal.