Raheem Sterling es el gran sueño del FC Barcelona​ para este próximo mercado de fichajes de enero. El conjunto barcelonista quiere un delantero con gol que pueda jugar por banda y el inglés es quien más gusta. Los azulgrana ya intentaron hacerse con él en verano y pidieron su cesión, pero desde Manchester se negaron rotundamente a permitir que una de sus estrellas se fuese gratis para reforzar a un potencial rival en Champions League.

El extremo está viviendo seguramente su peor arranque de temporada desde que llegó al City. El internacional por Inglaterra, que ya perdió algo de protagonismo la campaña pasada, ha pasado de ser intocable a ser un suplente habitual y ya no goza de la total confianza de Pep Guardiola. Por ello, ya en verano pidió marcharse, aunque no tuvo suerte y se tuvo que quedar. No obstante, si su situación no cambia, en enero el británico insistirá en salir para jugar más.

El Barça​ sabe que el atacante no está contento con su rol en el cuadro 'cityzen' y es por eso por lo que intentarán su fichaje en el mercado invernal. Según parece, los catalanes ya contaron con su "okey" en verano y el futbolista también estaría por la labor de mudarse al Camp Nou en unos meses si sigue sin ser titular. Raheem sabe que en el City tiene complicado ser importante, mientras que en Barcelona lo sería con total seguridad.

En 'The Sun' aseguran que desde Manchester, pese a todo, no quieren que se marche y, de hecho, desean renovarle. Su contrato termina en 2023, por lo que le objetivo sería ampliárselo antes de llegar al verano de 2022, cuando entraría en su última temporada. Por ello, los 'cityzens' ya habrían iniciado conversaciones para blindarle, aunque se han encontrado con el "no" del jugador, que prefiere esperar para ver qué papel le sigue dando Guardiola.

Si el entrenador del City no le empieza a dar más importancia en el equipo - hasta ahora ha sido titular solo en dos de siete partidos de Premier League - Sterling forzará su marcha en enero o a más tardar en verano. El Barça estará muy pendiente a todo, ya que sabe que al extremo le seduce la idea de liderar el nuevo proyecto culé en una liga completamente nueva. Sería una experiencia muy distinta para él y eso es algo que en el Etihad no le pueden dar.

La fórmula para la llegada de Sterling sería una cesión

La fórmula para que el internacional por Inglaterra acabe en el Barcelona en enero es una cesión, ya que en estos momentos el equipo azulgrana no tiene dinero para afrontar un traspaso. Se comenta que hay 16 millones de euros para la llegada de un atacante, y ese dinero se destinaría para pagar el sueldo de Sterling. Se espera que las buenas relaciones con el City faciliten su llegada, pero en verano eso no valió de nada y está por ver que en invierno permitan que la operación se haga.