El diario "MD" aseguró hace unos días que el joven guardameta germano del FC Barcelona, Marc-André Ter Stegen, no entiende por qué, durante el mes de enero y hace muy pocos días, se sigue hablando de un futuro traspaso al Liverpool de Jürgen Klopp, al Manchester City de Guardiola o al Manchester United de cara a la próxima temporada, dado que su único objetivo, estando perfectamente integrado en la plantilla del Barça, es el de seguir evolucionando como cancerbero en el mejor club del mundo y luchar por la titularidad con Claudio Bravo de cara a la próxima campaña 2016-17, teniendo el alemán la gran esperanza de poder asumir más titularidades en Liga BBVA de las que ha logrado durante la presente campaña.

La prensa británica aseguró hace pocos días que el FC Barcelona había puesto un precio de 28 millones de euros a la salida de Ter Stegen rumbo a Liverpool, y que desde Anfield Road llegaron a lanzar una propuesta durante el pasado mercado de invierno de 14 "kilos" por intentar hacerse con sus servicios. Más allá de que lo segundo pueda ser cierto, cabe recordar que el arquero nórdico tiene una cláusula de 80 millones de euros con el club azulgrana y que el Barça no tiene pensado traspasarle, ni mucho menos.

Aunque siempre ha dejado claro que le gustaría jugar todos los minutos posibles en la portería del FC Barcelona y que le disgustó no jugar ni un minuto en el Mundial de Clubes de Japón 2015, Ter Stegen sabe a la perfección que no va a disponer en ningún otro club de la proyección internacional y el prestigio que ostenta actualmente en el FC Barcelona, el club que hoy por hoy tiene más posibilidades de ganar todos los títulos que dispute.

El alemán ganó la pasada temporada la mayor parte de los títulos de su corta carrera deportiva en sólo un año y con la camiseta azulgrana. Su novia Daniella, además, está estudiando arquitectura en Barcelona y la pareja está muy contenta y perfectamente instalada en la ciudad catalana, a la que se ha adaptado rápidamente. Ter Stegen no cambiará de aires... A menos que el Barça quiera.